Paola Ugaz tras ser recibida por el Papa: es una reparación simbólica a quienes investigan al Sodalicio

Paola Margot Ugaz Cruz es una periodista de investigación y escritora del Perú, quien junto a Pedro Salinas se documentaron durante cinco años sobre los abusos sexuales, psicológicos y físicos cometidos en la organización católica el Sodalicio de Vida Cristiana (SVC), lo cual fue revelado en el libro “Mitad Monjes, mitad soldados”.

Ella ha sido recibida por el Papa Francisco quien, según manifiesta, mostró su solidaridad para las victimas de abusos por parte de la iglesia católica. Precisó que la reunión con Jorge Bergoglio fue muy emotiva e importante porque es un reconocimiento simbólico al recibir a una periodista peruana que investiga al Sodalicio y es un reconocimiento al trabajo investigativo realizado con Pedro Salinas.  

Argumenta que el SVC  es una “máquina donde te quitaban la voluntad y más que una organización católica es una organización política” donde los fundadores, entre los cuales se encuentra el arzobispo de Piura, tenía conocimiento y actuaban contra los adolescentes y jóvenes que captaban.

En Cutivalú, Ugaz sostiene que después de la publicación del libro de investigación han recibido ataques, y el 2018 el arzobispo de Piura Antonio Eguren Anselmi la denunció a ella y a Pedro Salinas por difamación. Es decir, atacan a los mensajeros y no atienden el mensaje, precisa; por ello la periodista considera que Eguren tiene un poder fáctico en la región Piura a juzgar porque la Fiscalía y el Poder Judicial hacen nada.

Paola Ugaz siguió narrando en Cutivalú que, luego de un pedido de un equipo del Vaticano, el  arzobispo de Piura retira la denuncia contra ambos, pero los dos periodistas siguen siendo perseguidos por una eco sistema de desinformación a través de medios como  Willax, La Razón,  Expreso, y periodistas como  Philipp Butters  y Luciano Revoredo de La Abeja.

Sobre el fundador del SVC, Luis Fernando Figari, se sabe que vive al sur de Italia en un retiro “espiritual” donde el Sodalicio lo cuidará hasta el fin de su vida. Es un retiro dorado: “la falta no sólo es del Vaticano, sino del Estado” señala Paola Ugaz, porque desde el 2017 se espera que en el Perú se lea el pedido de prisión preventiva contra Figari.

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