El 17 de marzo de 2021 se produjo el deslizamiento de uno de los Depósitos de Material Excedente (DME) del sector Cruz Blanca, propiedad del Consorcio Vial Piura que ejecuta la construcción de la carretera Canchaque – Huancabamba. Esto provocó el represamiento de la quebrada Pusmalca y, producto de ello, un huaico que arrasó con animales, viviendas, puentes, áreas de cultivo, canal de riego, sistema de agua potable y vías vecinales del distrito de Canchaque.
Seis meses antes, en octubre del 2020, mediante una carta dirigida al alcalde del distrito de Canchaque, Aldo Álvarez Ocaña, los miembros de la Comisión de Usuarios de Agua de este distrito, ya habían advertido del riesgo de un desastre por la presencia de material de desmonte en los relaves de los cerros, en el tramo de la carretera Canchaque- Huancabamba, en la región Piura, sin embargo, no obtuvieron respuesta.
Ahora, nuevamente el presidente de la Comisión de Usuarios de Riego de Canchaque, Basilio Cunia Chinguel, advierte que los depósitos de materiales se mantienen llenos en la cabecera del distrito y con el inicio del periodo lluvioso sumado a la falta de sistema de drenaje en los depósitos de material, se corre el riesgo de una nueva emergencia que puede evitarse.
“Hemos ido a los lugares donde están almacenando la maleza y se ha quedado que eso sea descolmatado y sacado de allí, porque todo eso está ubicado en la cabecera del distrito de Canchaque. Se debe tener en cuenta que aquí, por la misma naturaleza, hay aluviones de enero a marzo por las mismas lluvias y puede ocurrir una tragedia más grave”, enfatizó.
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Los damnificados por el aluvión ocurrido en Canchaque llevan casi 6 meses esperando que la empresa responsable se haga cargo por los daños ocasionados. Sin embargo, todo parece indicar que la espera se extenderá por un tiempo más, pese al riesgo latente de una nueva tragedia.
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