“Tenemos una débil legislación ambiental gracias a la presión de empresas mineras y campañas mediáticas”

Hace un mes ocurrió lo que se ha considerado el “peor desastre ecológico” en el Perú de los últimos años, ocasionado por la empresa española Repsol que derramó más de 11 mil barriles de petróleo en el mar de Ventanilla, Lima. ¿Esta empresa extranjera ha asumido alguna responsabilidad por el daño que ha ocasionado? ¿El Estado peruano ha aplicado las sanciones correctas en este caso?

Para el ex viceministro de Gestión Ambiental del Minam, José De Echave Cáceres, la intervención estatal no ha sido tan contundente. El motivo: en el Perú no hemos terminado de construir una institucionalidad que tenga fortalezas o herramientas necesarias para controlar, regular, fiscalizar, y sancionar los delitos ambientales, señaló el economista en entrevista con Cutivalú.

Pero lo peor es que, según De Echave, en los últimos años hemos ido debilitando nuestras instituciones y las normativas ambientales. Recordó que desde el 2013 este panorama se ha acrecentado y puso como ejemplo la Ley 30230 que congeló por dos años a la OEFA y le quitó capacidad sancionadora.

“Debemos reconocer que los organismos han sido debilitados por campañas muy fuertes en medios de comunicación y gremios como la Sociedad Nacional de Minería Petróleo y Energía que decían que las exigencias ambientales en el Perú eran muy altas. Y esto ha debilitado la institucionalidad ambiental. Para ellos el mejor escenario es la autorregulación de las empresas; eso les encanta. No les gusta que el Estado les controle y les regule” dijo el investigador José de Echave.

José De Echave señala que las actividades de hidrocarburos son de riesgo y siempre producirán derrames, por lo que se debería tener legislaciones rigurosas con los mejores estándares ambientales.

En ese sentido, De Echave explica que, tanto el Poder Ejecutivo como el Congreso deben ser el foro de discusión y debate de marcos legislativos ambientales. Sin embargo, lamenta que, cuando llega una propuesta del Ejecutivo al Congreso esta se debilita, y desde el Parlamento se rehúye a la discusión bajo el falso argumento que el control ahuyenta la inversión, cuando en realidad, detrás de todo hay lobbies empresariales.

“Ojalá los congresistas se pongan a trabajar, ahora que aparentemente todos se han vuelto ambientalistas y preocupados por la problemática ambiental, aunque ya no está en las primeras planas; pero la iniciativa puede ser también del Ejecutivo”, manifestó el economista.

“Recuperar el ecosistema tras el derrame de petróleo en Lima tardará años porque la limpieza es superficial”