Siete de cada diez mujeres se encarga de labores del hogar sin remuneración 

Brechas. A pesar del avance de la participación femenina en el campo laboral, las desigualdades con los hombres persisten en algunos aspectos,como la distribución de las tareas domésticas y salarios.

La última encuesta sobre representaciones del trabajo de cuidado en el Perú, elaborada por el Instituto de Estudios Peruanos (IEP), Oxfam y el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, reveló que 7 de cada 10 personas señalaron que en su hogar la mujer es la principal responsable de las responsabilidades domésticas, pero solo el 31 % considera que esta actividad debe ser remunerada.

En contraste, más de la mitad cree que solo se debe pagar si es una persona externa a la familia. Esto refleja un panorama donde cerca de un 70% de mujeres realiza esta labor sin una remuneración.

Dificultades actuales

En ese contexto, Sadith Sarmiento, coordinadora de proyectos de Fundación Forge, precisa que, si bien los estudios de Goldin se centran en desarrollar la situación de las mujeres en EE. UU. a lo largo de 200 años, también son un reflejo de las condiciones laborales femeninas en varios países, incluido el Perú.

Especialmente, el análisis del premio nobel indica que las dificultades laborales aumentan de manera más pronunciada después del nacimiento del primer hijo.

“Hay un quiebre cuando las mujeres empiezan a tener responsabilidades en casa. La organización de la economía demanda presencialidad, y ellas no pueden estar al 100% si se encargan del cuidado doméstico y de los hijos”, indicó Sarmiento a La República.

Además, precisó que en Perú, 7 de cada 10 jóvenes son informales, de los cuales 5 son mujeres porque no se adecúan a los horarios formales.

Otro factor clave son las altas desigualdades salariales. Según el INEI, al segundo trimestre del 2023, la diferencia en los ingresos entre hombres y mujeres ascendía a S/ 500. Si nos centramos solo en regiones, esta disparidad sube incluso a S/ 700 o hasta S/ 900.

Ley Nacional de Cuidados

Para hacer frente a esta situación, Liz Meléndez, directora ejecutiva del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, mencionó que es necesario que se implemente una Ley Nacional de Cuidados que garantice un sistema de servicios de calidad para el cuidado de niños, personas adultas o con discapacidad.

Esto debido a que actualmente no hay servicios públicos accesibles que brinden esta opción de un cuidado seguro.

“Esta falta tiene un impacto mayormente en las mujeres que asumen estas labores y finalmente tienen empleos más precarizados o postergan sus posibilidades de desarrollo profesional”, señaló Meléndez.

Explicó que, a menudo, este trabajo es considerado tiempo gratuito, pero muchas veces las mujeres que realizan estas labores se enfrentan a situaciones de estrés, y pueden verse emocionalmente afectadas e incluso descuidar su propio bienestar mientras cuidan de los demás.