Los vecinos y vecinas que viven hace más de cuatro décadas en el asentamiento Ignacio Merino, distrito de Veintiséis de Octubre, se encuentran atemorizados por los constantes asaltos que ocurren en las calles de su localidad. Y es que la delincuencia ya no solo les arrebata dinero, celulares u otros objetos de valor, sino que da un paso más y se atreve a quitarles hasta la vida.
Así, tras la reciente muerte del joven Juan José Sabino Arias Vilela (21), quien fue asesinado de un disparo por avezados delincuentes que querían robarle sus pertenencias, los moradores se armaron de valor y a una sola voz exigieron justicia y mayor resguardo policial en la zona, así como la instalación de cámaras de videovigilancia.
De acuerdo con el fiscal vecinal de la Juveco de Ignacio Merino, Miguel Gallardo, la muerte de Vilela es la primera del 2024 y la cuarta que sucede entre el 2023 y el presente año a manos de la delincuencia en dicho asentamiento humano. Precisó, además, que dos de las víctimas fueron vecinos de la zona.
“Hasta el momento tenemos cuatro fallecidos, justamente, por esta ola delincuencial. Una fue la señorita Sandra Palomino Espinoza, que fue por un asalto, le cayó un balazo en la cabeza. La segunda fue la señorita Margarita Guarnizo, que también le cayó una bala perdida, también por un asalto. El tercero fue un venezolano que le dispararon afuera de un bar que está en Ignacio Merino. Y este año comenzamos con un fallecido con un impacto de bala. No es morador, pero sucedió aquí. Ya tenemos cuatro muertos acá y hasta ahora no hay ningún culpable”, dijo a Cutivalú.
Piden cámaras de videovigilancia en asentamiento Ignacio Merino
El dirigente también señaló que en algunos casos la policía logra detener a los delincuentes, pero horas después son puestos en libertad debido a la falta de pruebas. En ese sentido, exhortó a las autoridades municipales a que equipen las calles de la zona con cámaras de seguridad, con el fin de que éstas capten los actos delictivos y cumplan el rol de pruebas fehacientes ante algún hecho.
“Un pedido que hace la población cada vez que hay un asesinato o un accidente es pedir cámaras, porque es la única manera de probar y no salir afectado. Y es que una cámara es un medio bien viable que se puede hacer en los asentamientos humanos, pero no lo quieren hacer”, aseveró.
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Por Daniel A. Jibaja
