Javier Milei, de la agrupación de derecha La Libertad Avanza, fue el candidato presidencial más votado en las PASO (Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) en Argentina, con poco más del 30 % de los votos.
Milei propone eliminar el Banco Central, dolarizar Argentina, que la educación no sea gratuita ni obligatoria, que se pague por la atención de la salud, la libre portación de armas, la venta legal de órganos, entre otras iniciativas radicales.
El desencanto de la política tradicional
El candidato se impuso frente al peronismo y a los partidos más tradicionales de Argentina. Al conocerse los resultados de las primarias, Javier Milei hizo polémicas declaraciones contra el kirchnerismo y lo calificó como “la casta política parasitaria” del país.
La preferencia ciudadana a favor de Milei es parte del auge de la extrema derecha en el mundo, que se ha acentuado con la popularidad del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, conocido por su política radical contra la delincuencia en su país y la violación a los derechos humanos.
Sin embargo, la preferencia actual no asegura la presidencia para Milei, pues un tercio de la ciudadanía no votó y este sector podría voltear los resultados en las elecciones definitivas.
¿Declive del peronismo?
El peronismo obtuvo menos de la tercera parte del electorado. El historiador y profesor de historia latinoamericana en la Universidad de Bolonia en Italia, Loris Zanatta, declaró para el medio RFI que el castillo ideológico del peronismo se está derrumbando.
“Sería fuerte la tentación de decir que estamos frente al declive definitivo de un fenómeno histórico que sobrevivió más de la cuenta porque las sociedades contemporáneas son demasiado plurales para que puedan afirmarse partidos de este tipo. Pero con el peronismo que es camaleón con capacidades de modificar su rumbo a lo largo de la historia, se requiere prudencia”, sostuvo.
La corriente de ultraderecha en América Latina
En una entrevista con BBC Mundo, Cristóbal Rovira, profesor de Ciencia Política en la Universidad Católica de Chile, señaló que “la ultraderecha tiene mucho más que ver con las ideas que se profesan. Y es aquí donde Milei calza bastante bien”.
El académico viene investigando el fenómeno de la extrema derecha en América Latina y Europa y considera que esta corriente política “llegó para quedarse”.
Milei, por ejemplo, busca prohibir la legalización del aborto, que fue aprobada en 2020. Defiende también la libre portación de armas y cree que la venta de órganos puede ser “un mercado más”.
Su candidatura promueve pasar de 18 ministerios a solo ocho, uniendo los ministerios de Salud, Educación y Desarrollo Social y la reducción paulatina de los planes sociales y subsidios.
Sin embargo, sus propuestas más populares giran en torno a la economía argentina. El candidato de La Libertad Avanza persigue la eliminación del Banco Central y la dolarización de la economía para terminar con la inflación. En total, propone reducir el gasto público en 15 %.
Según su plan de gobierno, se quitarían el 90 % de los tributos que tienen un impacto del 2 % en el PBI y “entorpecen” la economía y, en el mundo del trabajo, se implementaría un esquema de seguros de desempleo en lugar de las actuales indemnizaciones.
En cuanto a la salud, el gobierno de Milei buscará el cobro de las prestaciones que actualmente recibe la población en forma gratuita o subsidiada. Propone la creación de un seguro universal que sea “proporcional a la capacidad de pago del receptor del servicio”.
Con esta propuesta, busca que tanto el profesional como el paciente puedan pactar los honorarios a pagar. También tiene planeado cobrar todos los gastos médicos a aquellos “residentes extranjeros que demuestren disponibilidad económica”.
Aunque la ultraderecha es una corriente en ascenso en la región, los especialistas aún no se atreven a afirmar el inicio de una ola política en toda Latinoamérica; sin embargo, es evidente que la victoria de Milei en Argentina dejaría un gran precedente para los países vecinos.
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