Ana Sánchez es una madre de Paita que vive un drama. En julio de este año, en plena emergencia por la covid ella llegó con su menor hijo a la clínica Los Cocos, cerca al centro de Piura, para ser operado de una apendicitis. La operación transcurría de lo más normal cuando de repente el doctor a cargo de la intervención quirúrgica salió de la sala de operaciones y les dio una preocupante noticia: el menor había sufrido un paro cardíaco.
A partir de ese momento, el drama empezó para Ana Sánchez, pues su hijo había quedado en estado de coma. Según el doctor, el paciente había sufrido un paro cardíaco producto de una sobredosis de anestesia, nos cuenta la desconsolada madre. Sin embargo, la clínica no contaba con una sala de cuidados intensivos por lo que el menor tuvo que ser trasladado al hospital Cayetano Heredia, donde se encuentra internado.
Si bien el adolescente no perdió la vida, todos los días la señora Ana Sánchez tiene que gastar diariamente 100 soles para que su hijo reciba por lo menos una terapia, de las tres que los médicos le han recomendado.
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Lo más indignante para la familia del menor es que nadie de la clínica Los Cocos se ha acercado a asumir algún gasto tras el daño ocasionado, pese a que en un primer momento se comprometieron a correr con la responsabilidad correspondiente.
Mientras tanto, Ana Sánchez tiene que estar pendiente de su hijo esperando en los exteriores del hospital Cayetano Heredia donde ella y algunos familiares han acondicionado unos cartones para dormir. “Solo estoy a la espera de la voluntad de Dios”, nos manifiesta con una voz resquebrajada doña Ana Sánchez.
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Cutivalú se comunicó con la clínica Los Cocos desde donde nos informaron que la oficina de administración nos llamaría para recoger su descargo. Sin embargo, hasta el cierre de esta nota no hubo respuesta alguna.
