Un gran número de los reclusos del penal de Piura sufrieron maltratos físicos y psicológicos en su infancia. El 14% tuvo a su padre en la cárcel por robo agravado y el 16% por tráfico ilícito de drogas.
Una encuesta realizada por el Observatorio Regional de Seguridad Ciudadana a los 500 reos del penal de Piura, reveló que la mayoría de internos arrastra problemas emocionales producto de la inestabilidad familiar.
Según la estadística, el 43% de ellos abandonó su vivienda antes de cumplir los 15 años de edad por razones diversas que comprometieron su estado emocional, en su mayoría relacionadas con la violencia en sus hogares. Otro común denominador es que muchos tienen familiares con antecedentes penales. Del total de encuestados, el 14 % tuvo a su padre en la cárcel por robo agravado; el 16% por tráfico ilícito de drogas y el 35% fue testigo durante su niñez de la captura de alguno de sus familiares (tíos y hermanos) y posterior sentencia en un centro penitenciario.
Para la psicóloga e integrante del Consejo Directivo del Colegio de Psicólogos, Lena Silva Bayona, la ausencia de los padres en el desarrollo de la personalidad es un agravante que desencadena malos hábitos y los hace vulnerables a delinquir. Los problemas y conflictos por los que los internos atravesaron durante sus primeros años de formación influyeron en su comportamiento, incluso al momento de realizar sus actividades personales, como por ejemplo buscar trabajo o divertirse.
Por ello, la psicóloga lamentó la falta de importancia que brindan las autoridades regionales a la salud mental, que representa claramente un problema en la población para la buena convivencia social y expresó que para hacer frente a la inseguridad y delincuencia es necesario que un 85% de las acciones estén direccionadas a mejorar la salud mental y un 15% en tratar temas logísticos que corresponde a la Policía y otros sectores.
Fuente: La República
