Durante los primeros cuatro días de febrero, los pobladores de La Unión acataron un paro para exigir al Ministerio de Vivienda que se retome la obra de agua y alcantarillado que fue paralizada desde enero de 2020. Para culminar con el paro, el Ministerio de Vivienda creó una mesa técnica y se comprometió a gestionar el financiamiento para la culminación de la obra con cuatro adicionales. Sin embargo, el compromiso no se ha cumplido y la obra corre el riesgo de quedar paralizada nuevamente.
El ingeniero Carlos Pingo Bayona, poblador de La Unión y parte de la mesa técnica creada por el Ministerio de Vivienda, explicó que para retomar el proyecto se espera el financiamiento de cuatro adicionales, que corresponden al reservorio, a los tramos críticos, a la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) y a la parte integral del proyecto. El primer adicional ya estaba asegurado, pero no hay presupuesto para los demás adicionales. “El MEF iba a publicar el decreto supremo para financiar los adicionales restantes, pero hasta ahora no tenemos noticias de esa gestión”, detalló Pingo Bayona en entrevista con Cutivalú.
Si bien la entidad encargada de destinar el presupuesto para los adicionales es el Ministerio de Economía y Finanzas, los integrantes de la mesa técnica que representan a La Unión cuestionan que el Ministerio de Vivienda, no haya concretado estas transferencias ya que su compromiso fue hacer las gestiones necesarias para asegurar el financiamiento y la continuidad de la obra.
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El 24 de mayo, la Contraloría General de la República publicó el hito de control nº 8, donde advierte que la falta de recursos y demora del Plan de Saneamiento Urbano (PNSU) en pronunciarse respecto a la reubicación de la PTAR y a uno de los adicionales. Al respecto, Pingo Bayona señaló que esta es una alerta de causal de resolución de contrato, ya que los adicionales de la obra superarían el 50% del presupuesto. “Esta es una advertencia que viene desde los hitos de controles anteriores. Eso ya es causal para que la empresa diga que el expediente estuvo mal y no se puede ejecutar el proyecto y nos quedamos en el aire nuevamente”, reclamó el ingeniero.
Además, el informe de la Contraloría advierte otras observaciones técnicas como la cantidad de cimentación, el uso de los equipos y el territorio que ocupará la obra de saneamiento. Para verificar lo advertido por la entidad de control, un equipo técnico de La Unión propuso hacer una visita y evaluación de la obra, sin embargo, el Ing. Carlos Pingo señaló que la residencia, la supervisión y el Ministerio de Vivienda no les brindaron las facilidades para ejecutar la evaluación.
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Por su parte, el alcalde de La Unión, Fernando Ipanaqué señaló que, si bien aún no se ha asegurado el financiamiento para los adicionales, la obra continúa. “Están en los avances de compactación para iniciar la construcción del tanque elevado y también se está gestionando otro adicional, entonces, se está trabajando”.
Para resolver la problemática que se ha formado en torno al presupuesto, la autoridad edil señaló que el Ministerio de Vivienda ha coordinado una reunión con las autoridades locales y la población este viernes 4 de manera virtual.
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Desde el Ministerio de Vivienda, se confirmó a Cutivalú que a partir de mañana, jueves 3 de junio, el equipo visitará la obra in situ para aclarar la situación con la población y las autoridades.
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