Este miércoles 4 la población de La Unión acatará un paro de 24 horas porque se anuló por segunda vez la adjudicación del proyecto de agua y saneamiento.
Ese fue el principal acuerdo de la asamblea pública realizada el último sábado en la plaza de La Unión, adonde llegaron integrantes del colectivo civil “La Unión de Pie” y el congresista Hernando Cevallos Flores.
La asamblea fue convocada por el alcalde distrital Walter Ayala Antón. “La convcatoria [al paro] la ha hecho la sociedad civil, y es la respuesta de un pueblo que se siente burlado y siente que [la anulación] es un desaire; ya van muchas postergaciones”, señaló Ayala en diálogo con Cutivalú.
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El alcalde anunció que este miércoles viajará a Lima para exigir ante el gobierno nacional que el proyecto se acelere. “Esperamos que los congresistas por Piura nos apoyen, porque es una lucha justa”, consideró.
El dirigente Arturo Cabellos, representante de “La Unión de Pie”, indicó que las calles serían cerradas, no permitirán tránsito de vehículos de servicio público ni que el mercado abra sus puertas, para lo cual se ha nombrado a una comisión.
El congresista Cevallos se comprometió a interceder en la solución de este problema. “[Queremos] que el Ministerio de Vivienda designe a un nuevo comité, estamos pidiendo una reunión con el nuevo ministro [Edmer Trujillo Mori] para conversar sobre este tema”, sostuvo.
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La adjudicación fue anulada porque el consorcio ganador presentó precios desactualizados. Se trata del Consorcio Libra, que ya estaba listo para firmar el contrato. Según la Resolución Directoral N° 032-2018, la nulidad es por “prescindir de las normas esenciales del procedimiento o de la forma prescrita por la norma aplicable”.
El Organismo Supervisor de Contrataciones del Estado (OSCE) detectó que el consorcio ganador no actualizó su propuesta con precios a diciembre, sino que se quedó en precios de julio, lo cual invalida el proceso.
Con esta nulidad de la buena pro, no se firmará el contrato y todo se retrotrae a la etapa de integración de bases. La obra, valorizada en más de 28 millones de soles, beneficiaría a más de 18 mil pobladores del centro de La Unión y de asentamientos aledaños como José Carlos Mariátegui, San José y San Antonio.
La obra está paralizada desde el 2013. En un principio estuvo a cargo de el municipio distrital, pero fue abandonada por dos consorcios: La Unión y San Luis. La paralización de la obra dejó población afectada y esperando por tener agua potable y servicio de desagüe.
El regidor Carlos Morales señaló que la obra debió ser retomada este 18 de abril, pero “en cuestión de horas” se declaró la nulidad de la buena pro. Consideró, sin embargo, que esta nulidad “ha sido saludable”, porque se hubiera podido generar un arbitraje entre el Estado y el consorcio ganador.
