Tras una citación de grado o fuerza, Alberto Fujimori asistió a la Base Naval del Callao, donde el Colegiado B de la Sala Penal Nacional procesa a Vladimiro Montesinos y mandos militares por el secuestro del periodista Gustavo Gorriti.
En la audiencia aseguró que Montesinos solo se encargaba de darle información sobre la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico. Adujo no recordar si su ex asesor de inteligencia le entregaba datos respecto a políticos o periodistas que manejaban información sobre seguridad nacional. «No me parece», dijo.
A esto agregó que no planificó nada con Montesinos para ejecutar el autogolpe del 5 de abril de 1992 y esta medida fue de su entera decisión.
Mencionó que en el Pentagonito coordinó con miembros del Ejército, la Marina, la Fuerza Aérea y la Policía Nacional, solo las medidas de seguridad. Pero aseguró no recordar los nombres de las personas que estuvieron en dicha reunión ni sus intervenciones.
Sin embargo, reseñó con precisión lo que les comentó a los militares respecto a la necesidad de dar el autogolpe. Dijo que era para defender su gestión presidencial que estaba en peligro, debido a un dictamen del Congreso que pretendía vacarlo por incapacidad moral.
Plan de detenciones
Alberto Fujimori, quien asiste a este proceso como testigo, negó que en las reuniones previas al autogolpe haya dispuesto detenciones de periodistas, políticos y abogados que tenían una posición contraria a su régimen. Afirmó que tampoco recordaba que le hayan entregado una lista con sus nombres.
Aseveró que se enteró por los medios de comunicación de las detenciones y secuestros que se hicieron aquel domingo 5 de abril.
«No pedí información al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. No tuve ocasión por los ajetreos», declaró ante los magistrados.
Tuvo que saberlo
En declaraciones a La República, el periodista Gustavo Gorriti desmintió a Fujimori y manifestó que sí supo de su detención.
«Cuando le reclamé (en conferencia de prensa que Fujimori dio a medios extranjeros) por mi secuestro y por mi computadora, él me dijo que entendía, y por lo que sabía, me la iban a devolver posiblemente ese mismo día. De tal manera que es muy difícil que supiera que me iban a devolver mi computadora como resultado de una intervención en mi casa y no que me habían arrestado», cuestionó Gorriti.
Y remarcó que posteriormete, el comandante general del Ejército en 1992, Nicolás Hermoza, le dijo que firmó la orden de detención porque ni Fujimori ni Montesinos querían hacerlo, y le pidieron que lo suscriba él. «Entonces, es falso que se haya enterado después», anotó.
(Fuente: La República)
