El «Doliente», Henry Saavedra Sojo, llevará la tradicional malarrabia como almuerzo para los damnificados cuyas viviendas resultaron inundadas por el desborde del río Piura.
“Hay quienes más lo necesitan ahora”, fue su frase. Su asombro llegó cuando vecinos y personas que nunca lo habían visto tocaron la puerta de su casa para dejarle arroz, aceite, fideos, conservas y muchas cosas más, cooperando con los 7 potajes del plato.
El sueño con su esposa era dejar la tradición de cerrar la calle y ofrecer sentados los siete potajes. “Pensábamos que mejor debería ir a buscar a los pobres y comer con ellos”, afirmó Henry.
Confía atender unas 2,500 personas en la zona de Pedregal Chico y Molino Azul, a quienes ya censó. “Queríamos cambiar eso de enviar invitaciones. Soñábamos como en la Biblia de salir a las esquinas, de dar a los pobres y esta vez se hizo realidad”, agregó.
