Confrontación. Exasesora insiste en que el ex fiscal de la Nación Pedro Gonzalo Chávarry ordenó violar el lacrado de la oficina de Juan Manuel Duarte. El fiscal supremo desmiente a su asesora y dice que actuaron a sus espaldas. El fiscal Reynaldo Abia los volverá a interrogar y pedirá levantar el secreto de las comunicaciones de ambos.
Este es el dilema o el trabajo que tiene enfrente el fiscal anticorrupción Reynaldo Abia en la investigación sobre la ruptura del lacrado del gabinete de asesores de su despacho y de la oficina de su asesor Juan Manuel Duarte, el 5 de enero pasado.
Allanamiento
Ayer, Rosa María Venegas volvió a ratificar ante el fiscal Abia que rompió el lacrado e ingresó y retiró una serie de documentos del despacho de Duarte por órdenes de su jefe en ese momento, Pedro Chávarry.
“Su versión se ha confirmado y efectivamente hay que esperar una documentación que tiene que presentar. Ha confirmado la versión que ofreció la semana pasada”, indicó el fiscal a los medios de comunicación.
El fiscal no dio más detalles. «La investigación tiene un carácter reservado, ella ha declarado y hay una situación en la que efectivamente ella quiere que se esclarezcan estos hechos. Ha presentado una serie de documentos que vamos a verificar», manifestó.
Venegas asegura, según fuentes de la Fiscalía, que el entonces fiscal de la Nación la llamó por teléfono y la convocó a ella y a otros funcionarios de su entorno para que acudieran el 5 de enero al noveno piso del Ministerio Público.
La noche anterior, el 4 de enero, el fiscal José Domingo Pérez había ejecutado el allanamiento de la oficina de Duarte, pero al ver que se habían cambiado la identificación en las puertas, procedió a inmovilizar todas las oficinas del gabinete de asesores.
De acuerdo con los videos de seguridad, el sábado 5 de enero, Rosa María Venegas y los policías a cargo de la seguridad de Chávarry rompen el lacrado, ingresan a las oficinas y retiran una serie de cajas. Luego, todos, incluyendo Chávarry, se retiran del Ministerio Público.
Al difundirse ese video, Venegas indicó a la prensa que ingresó por iniciativa propia. Ahora, declaró a la Fiscalía que lo hizo siguiendo instrucciones y órdenes del fiscal de la Nación. Incluso habría asegurado que se planteó ingresar por las ventanas de las oficinas, pero desistieron por la logística que eso habría requerido.
Según las fuentes de la Fiscalía, Venegas habría dicho que Chávarry les aseguró que no había impedimento legal alguno, pues la inmovilización dispuesta por el fiscal Pérez era ilegal y todo sería anulado.
Chávarry lo niega
Sin embargo, también fue interrogado Chávarry y este insiste en una historia distinta. El fiscal supremo y ex fiscal de la Nación niega haber ordenado la violación del lacrado e insiste en que acudió a su oficina para realizar su trabajo como un día normal. Que los asesores y el personal de seguridad actuaron a sus espaldas.
«Hoy día se ha desarrollado con normalidad la declaración del anterior fiscal de la Nación, el señor Pedro Chávarry, en el marco de la investigación en el tema de las oficinas que presuntamente han sido deslacradas«, informó a la prensa.
Enfatizó que por lo reservado de la indagación no podía dar detalles de lo dicho por Chávarry. El fiscal supremo respondió 34 preguntas sobre el allanamiento, las oficinas que ocupaban sus asesores, dónde se encontraba el viernes 4 y sábado 5 de enero y los motivos de su presencia en el piso 9 del Ministerio Público, un fin de semana, entre otros detalles, como su relación con el personal de su despacho.
Chávarry va a continuar declarando el 18 de marzo, también nuevamente a las 10 de la mañana.
Pruebas
Para probar que es ella la que dice la verdad sobre la violación de lacrado, Rosa María Venegas ofreció a la Fiscalía el registro de llamadas de su teléfono celular, para mostrar las insistentes llamadas de Chávarry.
Para eso acudió ayer al despacho del fiscal Abia, con quien permaneció cerca de dos horas. Sin embargo, los registros no estaban completos. Según fuentes de la Fiscalía, falta el registro del 5 de enero, el día clave.
Por eso Venegas regresará hoy al despacho del fiscal Abia para entregar la información faltante o para autorizar el levantamiento del secreto de sus comunicaciones y tener el registro completo de sus llamadas, que prueben las órdenes de Chávarry.
Buscan más videos de seguridad
El fiscal Reynaldo Abia también ha pedido los registros de audio y video de todos los pisos del Ministerio Público del 5 de enero, que permitan aclarar sin ninguna duda qué ocurrió ese día.
Cualquier fiscal sabe que un lacrado de oficina es sagrado. Se puede cuestionar la medida o esta pueda ser anulada, pero hasta que no intervenga el juez, es intocable.
Si el fiscal de la Nación o sus asesores decidieron romper el lacrado es porque consideraron que las pruebas que había que desaparecer eran más peligrosas que violar la disposición del fiscal José Pérez.
Fuente: La República
