Cerca de 6 mil peruanos esperan con urgencia donación de órganos para seguir viviendo

En Piura, son 252 personas que esperan por un trasplante de córnea

Foto referencial

En el Perú, apenas uno de cada millón de personas dona sus órganos, cifra que preocupa debido a la gran demanda que existe de personas que esperan desde hace mucho tiempo para beneficiarse con una donación. Mientras que un 76% de los ciudadanos no aceptan donar sus órganos en su Documentación Nacional de Identidad (DNI).

En el día del donante (23 de mayo), se busca concientizar y dar a conocer la importancia de la donación puesto que permite salvar vidas de personas que muchas veces también fallecen debido a que no encuentran un donante a tiempo.

Actualmente existen 9.000 personas que esperan una donación, pero 5.904 requieren urgente un trasplante debido a la gravedad en que se encuentran. Aproximadamente, al año 700 personas fallecen a nivel nacional por falta de una donación de órganos.

En nuestra región, se realizan trasplantes de córneas en el hospital regional Cayetano Heredia, a través del Instituto Peruano de Oftalmología.

Según el doctor encargado del área de trasplantes del hospital Cayetano Heredia de Piura, Rafael Gallo, en el 2018 se han trasplantado 78 córneas, y en lo que va del 2019 se han realizado 27 operaciones. Sin embargo, aún hay 252 personas a la espera de un trasplante de córnea.

Trasplante de córnea / Foto referencial

El procedimiento que se sigue es, primero el donante debe consignar en su Dni que sí quiere donar. Luego se evalúa la situación de sus órganos dentro de un plazo de 24 horas para evitar que se alteren. Inmediatamente son los médicos responsables quienes se encargan de su conservación y traslado.

En este año se han registrado dos casos de donación multiórganos. Y en el 2018, fueron cinco personas cuyos órganos fueron trasladados a la capital para las intervenciones quirúrgicas que salvaron varias vidas.

Muchas veces el problema no es el donante, sino los familiares quienes se oponen a este proceso, señala el médico Rafael Gallo. Por ello considera que debería modificarse la legislación para evitar que más vidas se apaguen por el egoísmo de personas que no respetan la voluntad de su familiar.

“Estamos ya en el mes de mayo, la donación aún es mínima. A pesar que han existido personas que deseaban donar, sus familiares se opusieron desde un principio”, expresó el especialista.

Testimonios:

1. Carlos Zapata es un piurano que se benefició con una donación de órganos. Sufrió durante 10 años con insuficiencia renal crónica, en este periodo tuvo que soportar las consecuencias de la enfermedad. Fue en el 2011 que pasó a la lista de las personas en espera por una donación. Al año siguiente, recibió la buena noticia que un riñón estaba a la espera de ser trasplantado a su cuerpo.

“Fui golpeado por la insuficiencia renal crónica. Tuve 10 años en diálisis, me golpeó mucho la enfermedad. Me deterioré, pero nunca perdí la esperanza de un trasplante. El 14 de agosto recibí el trasplante en el hospital Almenara. Esto cambió la calidad de mi vida. Me siento más fuerte y trabajo porque aún tengo que mantener a mi familia”

2. Ruth Igoñi, es una joven que recibió la donación de córnea y fue operada en el hospital Cayetano Heredia. Ella califica de esperanza, la oportunidad de saber que otra persona sin conocerla donaba el órgano que su cuerpo había perdido.

“Es feo perder la visión, sientes que la vida se te apaga. Gracias a Dios que recibí a tiempo esta donación de córnea que cambio mi vida. Soy joven y necesitaba ver a mis dos hijos. Con la voluntad de Dios me trasladaron de Rioja a Piura. Solo queda cuidarme bien y recuperarme muy bien”, contó entre lágrimas Ruth.

3. La madre de una joven donante que murió hace dos semanas, contó que es una decisión muy fuerte aceptar el hecho de que un familiar autorice ser donador de sus órganos.

“Como familia fue muy duro respetar la decisión de mi hija. Ella desde un primer momento nos dijo que quería donar. Así fue, hay que entender que donando podemos salvar otras vidas. Y eso es lo que logró mi hija. Es necesario a veces desprenderse de lo más preciado. Al final nos sentimos muy bien”, relató la madre.