En un severo problema se encuentran los vecinos de la prolongación del malecón María Auxiliadora, en el distrito de Castilla. Y es que más de 80 viviendas se encuentran atrapadas debido a una mala ejecución en la construcción del margen izquierdo de la defensa ribereña del río Piura.
En conversación con Cutivalú, el dirigente vecinal Max Lozada informó que esta situación “ocurre entre la avenida Jorge Chávez y el grifo que va dirigido hacia el puente Bolognesi”.
Explicó que antes del inicio de las obras en el cauce del río Piura, sus viviendas se encontraban a una distancia de más de 20 metros; sin embargo, ahora está a tan solo dos metros y a un desnivel de casi metro treinta de altura de la pista, por lo que ahora deben trepar para ingresar y salir de sus casas.
“Antes, la defensa, de la que somos nosotros vecinos, quedaba a unos 20 metros de nuestras casas. Luego, en el gobierno anterior se iniciaron las obras para ensanchar el paso del río, este pasaje se redujo a un par de metros y el nivel de la pista aumentó dejando metro treinta de altura de nuestras casas, por lo que ahora ya no podemos ni salir ni entrar. Para hacerlo tenemos que trepar”, dijo.
Bajo esa premisa, Lozada señaló que en ningún momento la empresa ejecutora ni autoridades del Gobierno Regional se comunicaron con los vecinos, pese a que este problema afecta a más de 80 viviendas.
“La gente ha venido a realizar estos trabajos sin consultarnos nada, solo han venido a subir y a subir. Ahora lo que pedimos es que esta distancia de dos metros que hay entre nuestras casas y el muro de la defensa ribereña, se haga, por lo menos, una pista auxiliar para poder salir nosotros”, manifestó.
Vecinos de Castilla solicitan una pista auxiliar
Ante esta situación, el dirigente vecinal solicitó que, al menos, se construya una vía auxiliar, con la finalidad de que puedan salir de sus viviendas. “Como ellos tienen los instrumentos, en esos dos metros que nos dejaron de salida deben hacer una pista auxiliar para poder sacar nuestros vehículos y también para salir nosotros sin tener que trepar metro treinta”, resaltó.
Agregó, además, que esta situación se complicaría con las lluvias, pues sus casas, que se encuentran a desnivel con la pista, quedarían inundadas. “Pero eso no es el único problema. Ahora cuando llueva el agua va a meterse a nuestras casas, porque el agua busca su cauce”, precisó.
Finalmente, solicitó la intervención del decano del Colegio de Ingenieros, Ing. Hermer Alzamora, para que brinde su apreciación crítica. “Ahora lo estamos llamando porque queremos que nos brinde un apoyo urgente”, dijo.
Por Daniel A. Jibaja
