Balance de gestión: 2 años de gobierno y Dina Boluarte se aferra al poder

Dina Boluarte
Dina Boluarte

Hoy se cumplen dos años desde que Dina Boluarte asumió la presidencia del Perú, tras la caída de Pedro Castillo, elegidos como parte de la fórmula presidencial de Perú Libre.

Sin embargo, estos 24 meses de gobierno han estado plagados de cuestionamientos, escándalos y un incesante rechazo de la población al mandato de Boluarte Zegarra. Pese a ello, y a algunas mociones de vacancia, sus aliados Fuerza Popular, Alianza para el Progreso y Renovación Popular, entre otras bancadas, han logrado blindar y mantener en el cargo a Boluarte, liberándola de las mociones de vacancia.

Pero recordemos un poco cómo llega la mandataria al sillón presidencial.

CÓMO INICIA TODO

Pedro Castillo fue electo presidente constitucional en las elecciones del 2021. Su vicepresidenta era Dina Boluarte. Durante este gobierno, ella se desempeñó como ministra del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), hoy en serios cuestionamientos por entregar comida malograda a los estudiantes del país, a través del programa Qali Warma, actualmente desaparecido.

La gestión de Castillo Terrones tuvo serios cuestionamientos y denuncias por corrupción. Asimismo, un agresivo grupo de congresistas inició múltiples denuncias y mociones para vacarlo, argumentando su incapacidad moral para comandar el país.

Tras varios meses de conflicto político entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo, Pedro Castillo decidió cerrar el Congreso de la República. Aquella decisión se emitió a través de una conferencia, el pasado 7 de diciembre del 2022. Leyendo un papel algo temeroso, el aún presidente en aquel entonces quebró la institucionalidad del país, con un golpe de Estado. Sin embargo, lo que devino luego no fue lo que el país esperaba, mucho menos Pedro Castillo.

Con la decisión de Castillo Terrones, el Congreso adelantó una votación para su vacancia, que se iba a realizar a las 3 de la tarde de aquél día. Siendo las 12.30 aún, el Parlamento se reunió, y con 101 votos aprobaron la vacancia de Pedro Castillo. Cabe recordar que las bancadas que votaron por la vacancia fueron Fuerza Popular, Acción Popular, Alianza para el Progreso, Avanza País, Renovación Popular, Integridad y Desarrollo, Podemos, y Somos Perú.

Tras la vacancia, detención y enjuiciamiento a Castillo por el delito de rebelión, el Congreso logró deshacerse del presidente al que había obstaculizado desde su primer día. Esto ocurrió luego de que Keiko Fujimori -por tercera vez- perdiera en segunda vuelta las elecciones presidenciales frente a Castillo.

LA ERA “BOLUARTE”

De esta forma, el Poder Legislativo entregó el poder a la vicepresidenta Dina Boluarte, para que asuma como la nueva jefa de Estado.

Pero su ascensión al poder no fue bien recibida por la ciudadanía, sobre todo en el sur. Tras la vacancia y detención de Pedro Castillo, y con Boluarte en el sillón presidencial, ciudadanos de Apurimac, Ayacucho, Puno y otras regiones, salieron a las calles para protestar contra la flamante mandataria. La población consideraba a Boluarte, y aún ahora lo hace, como una presidente ilegítima. La ciudadanía pedía nuevas elecciones y que tanto la presidenta como los congresistas renunciaran a sus cargos.

MUERTES EN PROTESTAS

Estas manifestaciones trajeron una respuesta dura del gobierno, que lanzó a las fuerzas policiales a acabar con las protestas. Esto terminó con la muerte de 49 personas, producto de los disparos y agresiones que sufrieron los manifestantes.

Pese a estas muertes, Dina Boluarte se aferró aún más al poder. La Fiscalía de la Nación mantiene una  investigación en contra de la presidenta por estas muertes, y buscar determinar que Boluarte fue la autora mediata de esos decesos.

People participate in a demonstration demanding the dissolution of Congress and to hold democratic elections, rather than recognize Dina Boluarte as Peru’s President, after the ouster of former President Pedro Castillo, in Lima, Peru, January 4, 2023. REUTERS/Angela Ponce

«ROLEXGATE»

Un nuevo escándalo que saltó a la gestión Boluarte fue los “rolexgate”. Tras una investigación del periodista Marco Sifuentes, del medio digital La Encerrona, quedó al descubierto que la jefa de Estado utilizaba relojes marca “rolex” de altísimo valor, que no coincidían con su patrimonio. Asimismo, la propia mandataria sostuvo que el gobernador de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, le había prestado esas joyas.

Sin embargo, luego de determinaron múltiples inconsistencias en sus declaraciones. Incluso, quedó en evidencia que tras algunas visitas de Oscorima a Dina Boluarte en Palacio de Gobierno, el Ministerio de Economía desembolsó más de 80 millones de soles al gobierno regional de Ayacucho, para una obra que hasta la fecha no inicia. La fiscalía le abrió un nuevo proceso a Boluarte, por un presunto enriquecimiento ilícito.

DIVIAC Y HARVEY COLCHADO

En ese caso, la Fiscalía y la DIVIAC también allanaron la vivienda de la mandataria, como parte de la investigación fiscal, tumbando la puerta de la vivienda con un “torito”. Luego de ello, el Ministerio del Interior, comandado por la propia Dina Boluarte, intentó pasar al retiro y denunciar por hechos irreales a Harvey Colchado, líder del equipo policial DIVIAC.

«LOS WAYKIS EN LA SOMBRA»

El caso “Los Waykis en la sombra” también alcanzó a la presidenta. Según la Fiscalía, este grupo habría operado para influir en designaciones clave en diversas regiones del país, a fin de facilitar la inscripción del partido político Ciudadanos por el Perú.

De acuerdo a un exprefecto, Nicanor Bolaurte, hermano de la mandataria, se habría encargado de operar y mover influencias para designar prefectos en regiones del país. Cobros ilegales por designaciones también es un tema que investiga el Ministerio Publico.

Cabe destacar que la investigación continúa y Nicanor Bolaurte se encuentra prófugo de la justicia, luego de que el juez Richard Concepción Carhuancho solicitara 36 meses de prisión preventiva contra el hermano de la presidenta.

VLADIMIR CERRÓN

Otro escándalo que redujo más su aprobación en las encuestas, fue el escape de Vladimir Cerrón, líder de Perú Libre, partido político que la llevó al gobierno. Un reportaje periodístico mostró que “el cofre”, vehículo presidencial de uso exclusivo de la presidenta, trasladó a la jefa de Estado hasta el condominio Mikonos, donde un mes antes había estado escondido Vladimir Cerrón.

Y se especula que Cerrón Rojas logró escapar escondido en “el cofre”, pues esta unidad vehicular puede pasar controles y peajes sin ser inspeccionado o supervisado.

VACÍO DE PODER

Pero uno de los escándalos más sonados fue su ausencia en el cargo por un lapso de 12 días, en junio del 2023. Tal como se expuso periodísticamente, DIna Boluarte desapareció del mapa sin que nadie sepa nada de ella. Luego, se conoció que se había sometido a una intervención quirúrgico-estética, para operarse y perfilarse la nariz.

En este tiempo, la mandataria no pidió permiso al Congreso ni avisó que se ausentaría del poder, lo que generó un vacío de poder. Hace 5 días, su expresidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, confirmó que la jefa de Estado sí fue sometida a una intervención quirúrgica, dejando claro que se configuró el vacío de poder. Pese a ello, las bancadas aliadas de la presidenta salieron en su defensa y minimizaron el hecho. Aún así, la Fiscalía le abrió una investigación.

Algunos meses antes, Dina Boluarte también viajó al extranjero sin dejar a nadie en el cargo presidencial, a pesar de que no tiene vicepresidentes. La excusa de la jefa de Estado fue que podía manejar el país de manera remota.

MOCIONES DE VACANCIA

Frente a estos hechos y presuntos actos de corrupción, algunas bancadas independientes interpusieron mociones de vacancia contra la jefa de Estado. Hasta el momento, Dina Boluarte ha sobrevivido a 9 mociones de vacancia. Los aliados de Boluarte, entre los que se cuenta a los fujimoristas y acuñistas, protegieron a la mandataria para que el pleno del Congreso no pueda vacarla, a pesar de los serios cuestionamientos.

Sólo una vacancia se mantiene por el momento, impulsada por la congresista Susel Paredes. Sin embargo, la parlamentaria señaló que sólo lleva 14 firmas de las 26 que necesita para que la moción pase a debate en el Pleno del Congreso.

A ello, se suma la reciente denuncia constitucional que interpuso la legisladora Margot Palacios contra la presidenta de la República, luego de que Alberto Otárola, expremier de Boluarte, confirmara que la jefa de Estado sí estuvo ausente del cargo por una operación estética.

BAJA POPULARIDAD

Cada una de estas denuncias y escándalos, así como las muertes que originó que gobierno, dieron como resultado que la popularidad de Dina Boluarte vaya a niveles nunca antes vistos.

En una reciente encuesta de DATUM, el 94% de la población desaprueba la gestión de la mandataria. Y sólo un 3% la aprueba. Estas cifras sólo demuestran el nivel de aceptación de Dina Boluarte en el cargo en estos 24 meses de gobierno. Pese a ello, la presidenta ha ratificado su permanencia en el cargo hasta el 2026, fecha en que se realizarían las nuevas elecciones.

No podemos dejar de mencionar que la poca eficiencia de sus ministros en carteras clave también le han pasado factura a su capital político.

Los casos más cuestionados son los de Juan José Santiváñez, en el Ministerio del Interior, por la inseguridad ciudadana desbordada, y por su conflicto personal con el agente Harvy Colchado y el agente Junior Izquierdo, alias “culebra”.

También se encuentran los casos de corrupción en el programa Qali Warma -hoy disuelto-, que depende del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS). Esta cartera está a cargo de Julio Demartini, quien estuvo como viceministro en el tiempo que Boluarte Zegarra era la ministra.

Otras carteras de poca efectividad y que no reportan ningún beneficio para la población son: los ministerios de Economía, Agricultura, Vivienda y Trabajo. Pese a todo, la mandataria se rehúsa a oxigenar estos portafolios.