Advierten que el 50% de niños y niñas entre 35 y 36 meses de edad sufren de anemia

Composición Cutivalú.

Angélica Zevallos, directora ejecutiva de Ruralia, dio a conocer que, la mayoría de los cerca de 2 millones de estudiantes que viven en zonas rurales no acceden a una educación de calidad. Asimismo, dijo que el 50% de niños y niñas entre 36 y 35 meses de edad sufren de anemia; en niñez temprana existe una disminución en la evolución de la tasa de matrícula; mientras que, en la niñez intermedia hay bajos niveles de aprendizaje y lejanía física.

“Además, más de la mitad de las escuelas rurales está a más de dos horas de las viviendas de los niños, pasando a adolescencia, existe una inequidad en el acceso a educación secundaria falta de escuelas y una baja tasa de transición hacia la educación superior”, expresó la directora de Ruralia.

Finalmente, en juventud y adultez, cerca de 8 millones de jóvenes y adultos no han terminado la educación básica y el 14% de ellos son analfabetos. Esta información es parte del informe Reto Ruralia 2022.

Participación de organizaciones

Asimismo, Zevallos mencionó que a nivel nacional son cerca de 800 organizaciones las que trabajan en educación y que en su mayoría se concentran en Lima, Cusco, Arequipa, Junín y La Libertad. Sin embargo, en la convocatoria lanzada para el Reto Ruralia 2022 postularon 130 organizaciones.

“Con ellas hemos podido analizar; por ejemplo, cuáles son los temas más frecuentes a los cuales se dedican sus intervenciones y hemos encontrado que son: educación con enfoque socioemocional, acceso a educación especializada, formación y capacitación docente y Tecnologías de la Información”, recalcó.

Intervención de organizaciones

Además, señaló que las poblaciones donde hay una mayor concentración de intervenciones por parte de las organizaciones están principalmente en la adolescencia con casi el 23% de las intervenciones identificadas, adolescencia intermedia que sería de 6 a 11 años de edad con el 21% de las intervenciones concentradas en esa población.

“Esto también nos indica que la población de primera infancia solo ha tenido el 4% de las intervenciones y ahí hay una oportunidad para que más organizaciones puedan visibilizar las problemáticas de la primera infancia y puedan desarrollar proyectos y programas para atenderlo”, agregó Zevallos.