Joven universitaria vive con una bala alojada en su mano, luego del disparo que recibió por parte de un delincuente que quiso robarle su mochila cuando viajaba de Cura Mori a Piura.
El hecho ocurrió el 1 de junio en Cura Mori cuando un delincuente la interceptó a bordo de una mototaxi y al no dejarse robar le disparó en el hombro y la mano derecha, sin embargo al ser trasladada al hospital Santa Rosa, ese mismo día le dieron de alta porque el médico que la atendió le dijo a sus familiares: “que una persona no muere con una bala en la mano.”
Por su parte, el padre de la menor Wilfredo Vílchez Chiroque exige justicia y que ubiquen al delincuente para hacerlo pagar por sus actos. Este hecho ha alarmado a los padres de familia de este distrito porque consideran que sus hijos no están protegidos, sobre todo en horas de la noche, cuando regresan de estudiar.
Se conoce que la joven, si bien está estable, el malestar no la deje hacer su vida normal, y su familia no cuenta con los recursos económicos suficientes para operarla en una clínica.
