Tres de cada 10 adolescentes abandonan el colegio por embarazo

Foto referencial.

Durante los últimos seis años, 150 mil niñas y adolescentes se convirtieron en madres, según el Seguro Integral de Salud (SIS). Lo más probable, es que muchas de ellas, se hayan visto obligadas a interrumpir su educación y forzadas a convivir con los hombres que las embarazaron.

En Perú, existen adolescentes que inician la convivencia desde los 13 años y en algunos casos, los hombres con los que conviven son mayores hasta por 10 años. Tal como se muestra en el estudio “Matrimonio, convivencia y paternidad temprana en Perú, Etiopía, India y Zambia”, realizado por el Grupo de Análisis para el Desarrollo (GRADE).

Las condiciones de pobreza y la falta de acceso a educación son factores determinantes que empujan a las niñas y adolescentes a dejar sus hogares para buscar mejores condiciones de vida, según revela el estudio.

Esta situación es aprovechada por sus parejas, quienes con promesas de brindarles mejores oportunidades, terminan replicando hacia ellas las mismas violencias de sus familias iniciales.

Su situación empeora cuando la adolescente queda embarazada, pues se ven obligadas a abandonar completamente los estudios para dedicarse exclusivamente al cuidado de los hijos y del hogar. Las estadísticas de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar 2017 (ENDES), respalda la información: 27,5% de adolescentes a partir de los 15 años dejaron de estudiar por su embarazo, por la convivencia o unión conyugal y/o por la necesidad de cuidar a sus hijos.

Del total de adolescentes que desertaron de sus estudios escolares por estos motivos, el 45,8% de adolescentes embarazadas o que ya son madres, residen en áreas rurales o de la selva.

Las cifras demuestran que, efectivamente, las regiones del Perú que cuentan con menos oportunidades económicas y educativas, presentan más casos de embarazos no deseados: el 24,2% de adolescente embarazadas vive en pobreza.

Prevención en los colegios

La clave para cambiar esta realidad que afecta y vulnera los derechos de miles de niñas y adolescentes es la educación sexual integral. Susana Helfer, viceministra de gestión pedagógica, enfatizó que para el Ministerio de Educación (Minedu), la educación sexual integral (ESI) es una prioridad.

“Es importante una formación integral para prevenir el embarazo adolescente. Tenemos un 13.4% de chicas entre 15 y 19 años que salen embarazadas y muchas veces tienen que abandonar la escuela para dedicarse a la maternidad”, declaró Helfer para Wayka.

La ESI está contemplada en el enfoque de igualdad de género que plantea el ministerio en el Currículo Nacional de Educación Básica, y que es fuertemente cuestionado por agrupaciones que se oponen a la implementación del mismo, a pesar de que cada día 10 adolescentes a partir de los 15 años queda embarazada.

El próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, la Corte Suprema decidirá el futuro del Currículo Escolar y de una parte de la implementación del enfoque de género en las escuelas.

En otras palabras, se decidirá sobre la posibilidad de que miles de niñas y adolescentes peruanas puedan cambiar o no la realidad en la que viven: sin acceso a una educación de calidad que les ayude a desarrollar las capacidades necesarias para decidir sobre sus proyectos de vida.

Fuente: Wayka