Los vecinos y vecinas del asentamiento Froilán Alama, ubicado en el distrito de Tambogrande, denunciaron que la municipalidad distribuyó agua sucia y con olores nauseabundos como si fuera potable, por lo cual temen que su salud se vea afectada.
La vecina Carmen Timaná dijo a CUTIVALÚ que primero padecieron por la restricción del servicio y cuando se restableció, después de 10 días, el líquido tenía apariencia turbia y sobre todo un olor a desagüe.
El encargado de control de calidad de la Municipalidad de Tambogrande, Manfredo Alzamora León, negó esta versión señalando que la municipalidad cumple con los procesos de potabilización del agua captada en el cerro El Ereo.
Cabe indicar que la semana pasada un grupo de vecinos del asentamiento Sagrado Corazón de Jesús hizo la misma denuncia y pidió que las autoridades municipales verificarán las redes de agua.
