Fue el 28 de octubre de 1975 la última fecha en que los peruanos vieron al seleccionado blanquirrojo disfrutar una final y alzar una Copa América. Millones de almas acompañaban desde su televisor o desde el Estadio Olímpico de Caracas, escenario cumbre de la victoria, al equipo dirigido por el DT peruano Marco Calderón disputar el encuentro ante Colombia que le permitiría luego recibir el título como el mejor equipo del continente.
Aquellos minutos fueron felicidad. En la calle, la gente celebraba con platillos y banderas bicolor que agitaban con emoción. El triunfo no era solo de los apasionados por el fútbol, pues mujeres, ancianos y niños peruanos salían de sus casas para celebrar a la blanquirroja. Muchos de ellos no vislumbraron que esa sería la última victoria que disfrutarían en mucho tiempo, en un torneo como la Copa América.
Recordar esta fecha nos conduce hacia un campeonato de América poco convencional, ocurrido hace 44 años. Era la edición 30 del torneo y no había, a comparación de la actual, una sede fija en la cual disputar los encuentros entre los seleccionados nacionales sudamericanos.
El destacado desempeño de figuras como Julio Meléndez, Hugo Sotil, Teófilo Cubillas y Juan Carlos Oblitas lograron que el país se posicionara como uno de los favoritos para aquella Copa América, pese a tener a un imponente Brasil y Colombia como rivales.
El camino había sido largo pero finalmente el seleccionado nacional logró llegar a la final con Colombia. Un partido de ida y vuelta definiría al ganador.
En el primer encuentro, el equipo colombiano se impuso sobre Perú; sin embargo, en el segundo duelo, el conjunto nacional hizo lo propio, anotando un 2 a 0 sobre el seleccionado cafetero.
El tercer partido, definitorio, se realizaría en Venezuela. El nacional Hugo Sotil logró que en el minuto 25, Perú marcara ese gol decisivo para el triunfo de este importante campeonato. Los noventa minutos transcurrieron entre la emoción y los nervios de ver triunfar, por segunda vez, al seleccionado blanquirrojo. Y lo lograron. El score llegó a 1 a 0 en el pitazo final. Perú era el mejor de América y la emoción se desató.
Más de cuarenta años después, el país se pone de pie para disfrutar de la emoción de ver nuevamente al seleccionado peruano en una final.
Dirigidos por Ricardo Gareca, las nuevas generaciones que no pudieron gozar de aquel triunfo de antaño esperan con ilusión el encuentro deportivo final de la Copa Brasil 2019 a realizarse este domingo, el cual podría dar a Perú la tercera victoria en esta copa, la más importante de América.
Fuente: La República
