Vecinos y amigos del obrero fallecido en un accidente de tránsito hace 95 días en el caserío de Cruceta en Tambogrande, piden al Ministerio Público de Piura que les entregue el cuerpo para darle cristiana sepultura.
El hombre se identifica como Eribirto Calva Llacsahuanga y según sus amigos de toda la vida no tenía familiares conocidos ni cercanos a él, es por eso que la fiscal Katty Moreno Salazar no entrega el cuerpo.
El accidente ocurrió el 15 junio en un accidente de tránsito en la carretera Cruceta Tambogrande, y desde entonces han pasado 95 días. Sus amigos ya le construyeron su nicho pero el cuerpo sigue en la morgue.
