El Juzgado dictó nueve meses de prisión preventiva contra Estéfany Raquel Delfín Altamirano (25) como presunta autora de los delitos de homicidio calificado consumado en agravio de Miriam Chanta Chinchay y homicidio calificado en grado de tentativa en agravio de Éricka Machado Carrillo.
Conforme los actuados la investigada habría hecho beber a las agraviadas un preparado luego de lo cual se sintieron mareadas y se quedaron dormidas. Al día siguiente las habría llevado hacia una chacra en una mototaxi donde les inyectó una sustancia.
Al ver que Miriam Chanta convulsionó tras la inyección dejó su cuerpo tirado en la puerta de la chacra y regresó a su casa con Éricka Machado donde la mantuvo encerrada hasta la mañana siguiente que le permitió salir devolviéndole los equipos celulares que retuvo.
El Fiscal Vengas Morales ofreció como elementos de convicción que vinculan a la investigada con los delitos: el acta de ocurrencia policial; de levantamiento de cadáver; de intervención policial; de Registro Domiciliario e Incautación y Lacrado de Especies entre las que encontraron blíster de pastillas Alprazolam; la declaración de la agraviada.
Así como el acta de hallazgo e incautación y traslado de una mototaxi y el resultado de Examen Hematológico practicado a la agraviada que sobrevivió el cual dio positivo para benzodiazepinas-bzo cuyo principio activo es Alprazolam, entre otros.
Estéfany Raquel Delfín Altamirano será ingresada al penal de mujeres de Sullana, desde donde afrontará el proceso que se le sigue como presunta autora de los delitos de homicidio calificado consumado y homicidio calificado en grado de tentativa por lo que podría ser condenada a 30 años de cárcel.
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