Opinión: «Firmeza contra la violencia de género»

Foto: La República

Por: Mirtha Vásquez, expresidenta del Congreso de la República

Cuando se han discutido normas que abordaban el tema de igualdad y contra la violencia, políticas que deconstruyan el machismo –la inclusión del enfoque de género en la educación, por mencionar una–, o la implementación de mecanismos que visibilicen a la mujer en diferentes roles –la paridad en los cargos de mayor relevancia–, hemos recibido en el mejor de los casos la indiferencia de la mayoría de sectores, incluyendo, por supuesto, la clase política, y, en el peor, la burla y el repudio de quienes subestiman o ridiculizan el tema del género.

Sin embargo estos días tenemos en el país un escenario político bastante remecido y alborotado, curiosamente a partir del tema de la violencia de género; parece que de pronto todos habríamos hecho consciencia de la importancia de rechazar esas vigentes diferencias que hacen que se normalicen la subordinación, el maltrato o la discriminación a las mujeres; la necesidad de ese feminismo otras veces ignorado y vapuleado.

Muy importante seguro las reacciones que se presentan, mujeres de todos los sectores y varios varones también se están manifestando frente al tema, pero cuánto de estas respuestas no solo son un hipo o una simple instrumentalización de un asunto tan sensible como fundamental y determinante para construir una sociedad no solo democrática, sino humanizada.

De la agenda pendiente de las mujeres víctimas de la violencia histórica, esterilizadas de manera forzada, violentadas sexualmente en la época del terrorismo, o víctimas de los conflictos sociales poco se habla, un conveniente silencio violenta sus causas.

Y es que para considerar que estamos luchando contra la violencia de género hay que considerar su abordaje desde la integralidad, desde un enfoque de sociabilidad y de politicidad, que hagan comprender la necesidad de la igualdad. Cuidado con la manipulación del tema, esa también es una forma de perpetuar las violencias.