María del Pilar Ávila Mauricio (30), natural de Paita, padece un drama que se ha convertido en una pesadilla. La telefónica ha otorgado 24 líneas de celular a su nombre sin su conocimiento, menos su consentimiento.
Dos de esas líneas han sido utilizadas para extorsionar. Por eso, ella ha sido denunciada injustamente dos veces por extorsión.
La Telefónica se ha desentendido del problema anulando los números otorgados irregularmente; pero, sin asumir ninguna responsabilidad por el gravísimo error de otorgar líneas sin pedir una huella digital y ni siquiera el DNI al solicitante.
Peor aún, la policía ha tratado a María del Pilar Ávila como la peor de las delincuentes, sin serlo. Para ellos no ha valido para nada la explicación del delito de la que más bien ella ha sido víctima.
María del Pilar Ávila Mauricio está indignada; y con justa razón. Ella estuvo a punto de sufrir un derrame y no es para menos. En uno de los casos casi fue encarcelada. Lo único que pide es justicia, nada más, que se sancione drásticamente a la compañía Telefónica para que no otorgue líneas sin verificar los datos y los documentos de los solicitantes.
Por supuesto, la policía también debe preocuparse por descubrir a la mafia de delincuentes que están detrás de estos hechos.
