Las redes sociales son una herramienta de comunicación entre los usuarios que la utilizan. En ellas se comparte información en formato de texto, imágenes, audio y vídeo. Para ello, se necesita contar con una cuenta donde cualquier persona puede crear un perfil para formar comunidad.
«Actualmente, las y los adolescentes utilizan estas redes sociales, pero muchas veces ellos no son conscientes de los riesgos a los que se exponen». Así lo explicó Isabel Requena Barreto, psicóloga de Construyendo Juntos Proyectos de Vida, durante la II Jornada de Escuelas de Familias en la I.E. Fe y Alegría N.°49.
¿Cómo funcionan las redes sociales?
En la mayor parte de las redes sociales, es necesario crear un perfil con los datos personales del usuario. En este perfil se suelen incluir los datos de contacto como el nombre y apellidos, e-mail, teléfono y una imagen. Asimismo, puede pedirte incluso tu fecha de cumpleaños y tu ubicación.
Una vez creado el perfil, el usuario puede realizar solicitudes de amistad y aceptar a otros usuarios para incluirlos en su lista de amigos y poder ver sus actualizaciones de estado o de contenido en el muro.
Sin embargo, si no se configura la privacidad de esta red social, todos pueden conocer la información personal de un usuario. Bastaría con buscar a alguien por su nombre y ¡bingo!, todos estos datos aparecerán al alcance de un click.
Por ello, «es importante saber qué tipo de información damos cuando nos registramos en una red social y conocer en qué red social están nuestros hijos», indicó Requena Barreto.
«Además, es esencial cuidar nuestra imagen en las redes sociales, porque una publicación que puede parecer divertida en la adolescencia, podría ser inadecuada o mal vista en un futuro», añadió Requena Barreto.
A continuación les compartimos algunas reglas para cuidar la seguridad de nuestras hijas e hijos en Internet.
En este enlace puede obtener más información sobre las actividades realizadas en la I.E. Fe y Alegría N.°49 en el marco del proyecto «Construyendo Juntos Proyectos de Vida», una iniciativa ejecutada por Cutivalú y financiada por Cementos Pacasmayo.
