Los bares y cantinas continúan generando la preocupación de la población de Las Lomas, pues algunos continúan funcionando, a pesar del cierre definitivo dispuesto por la municipalidad distrital.
La ciudadana Josefa Rodríguez Agurto manifestó, a través de Cutivalú, que Las Lomas dejó de ser «la ciudad de la paz» desde que comenzó a proliferar la minería ilegal, porque se multiplicaron los bares y cantinas, así como la gente de mal vivir.
Rodríguez Agurto señaló que la presencia de delincuentes con armas de fuego en las cantinas pone en riesgo a toda la población lomeña.
Cabe indicar que, ante el incremento de la delincuencia en Las Lomas y la inseguridad ciudadana, la población ha planteado el cambio del gobernador político.
Asimismo, los pobladores y pobladoras piden al gerente municipal, Julio Lizano Huamán, cumpla con el compromiso que asumió con la población de cerrar definitivamente los bares y cantinas.
Foto: El Comercio / Referencial