Los informes de Derechos Humanos han tenido impacto en la respuesta del gobierno ante las protestas, informó Cruz Silva del Carpio, abogada del Instituto de Defensa Legal (IDL)
En entrevista de “Punto de Agenda”, Cruz Silva del Carpio abogada del Instituto de Defensa Legal (IDL) indicó que lo que ha cambiado en las movilizaciones es que están realizándose luego de diversos informes de Derechos Humanos que identifican que hubo un uso excesivo de violencia con más de 40 muertes en el país.
“Estas marchas son posteriores y han tenido cierto impacto en el gobierno, teniendo en cuenta que Naciones Unidas, relatorias internacionales y la Corte Interamericana tiene sus ojos en el Perú. Ojala que el Estado respete ahora sí el derecho a la protesta”, expresó Silva del Carpio.
Silva del Carpio identifica que lo que si no ha cambiado es que el discurso del gobierno frente a las marchas es que estas pretenden dividir, generar caos y no permitir el desarrollo. Además está interesado en generar criterios relacionados con vandalismo y destrucción de zonas publicas y privadas. “Como la marcha no incurrió en estos criterios el gobierno califica a esta marcha como un fracaso”, manifestó Cruz Silva.
La abogada indicó que las marchas del 19 de julio fueron multitudinarias ya que participaron más de 50 mil personas que reclamaban la salida de Dina Boluarte y un nuevo proceso de elecciones. “Esta cantidad de personas pidiendo la salida de Boluarte es el fracaso del gobierno. Cincuenta mil personas en la calle no es una marcha fracasada frente a una desaprobación del 85% de dos entes del Estado”, dijo en diálogo con Cutivalú.
Silva del Carpio indicó que en esta marcha al igual que en las otras también se ha presentado el discurso público de que marchar es algo indebido políticamente Además se ha hecho uso indiscriminado del control de identidad y de demostraciones de fuerza con el fin de amedrentar a la población.
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