Hoy, 28 de agosto, se conmemoran 20 años de la presentación del informe final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), un trabajo que se desarrolló durante 2 años, y que tuvo 9 volúmenes y 2 mil 500 páginas de un análisis de las causas y consecuencias de la violencia y el terror que vivió el Perú entre los años 1980 y el 2000.
Este informe llevó a conocer el dolor y soledad que vivieron hombres y mujeres de pueblos enteros, que sufrieron violencia y pobreza a causa de un pensamiento demencial.
De acuerdo a este informe, el terrorismo dejó 70 mil personas muertas, y la principal causa de terror fue el surgimiento de una ideología violentista.
La CVR logró precisar que el 85 % de las víctimas pertenecían a las regiones de Ayacucho, Junín, Huánuco, Huancavelica, Apurímac y San Martín. Asimismo, el 56 % de estas víctimas eran agricultores; mientras que el 75 % era quechua-hablantes.
De acuerdo a la Defensoría del Pueblo, 19 mil 200 personas siguen en condición de desaparecidas, y el proceso de búsqueda es una de las tareas menos priorizadas por el Estado.
Tal como informa Ojo Público, existe un 39% de los desaparecidos que no se conoce su ubicación, pero que sí fueron vistas siendo detenidas o reclutadas forzosamente. El 35 % de desaparecidos se presume su paradero. Hay un 19% de personas desaparecidas de las que no se tiene ninguna información; mientras que el 7 % habían fallecido, pero no se conoce la ubicación de sus cuerpos.
Según dijo el expresidente de la comisión de la CVR, Salomón Lerner, se pudo concretar reparaciones económicas simbólicas propuestas por el informe de la comisión de la verdad, gracias a la colaboración de la cooperación extranjera.
Cabe mencionar que el 2017, en el marco de la Ley N° 30470, Ley de Búsqueda de Personas Desaparecidas durante el período de violencia 1980-2000, se creó la Dirección General de Búsqueda de Personas Desaparecidas, donde se presentó el primer listado del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Sitios de Entierro (RENADE).
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