Durante la intervención que contó con la participación de Juan Hernández SJ, los docentes visualizaron que la corrupción no solo se da en las organizaciones del estado, sino también en la escuela.
Después del análisis, Juan Hernández destacó que para ser felices tenemos que entrenar en las diferentes canchas como son nuestra propia vida, la familia y la sociedad.
Finalmente, Juan Hernández recalcó que la corrupción está en todo el mundo y que aprendamos a no solo a ver lo negativo, sino lo positivo como el amor y el servicio y trasmitirlo en el aprendizaje a nuestros escolares.
Esta intervención es ejecutada, gracias a la Fundación Altamira de España y Cutivalú, que tiene el objetivo de desarrollar capacidades en tutores y estudiantes para que sean capaces de identificar actos de corrupción en el aula, el colegio, el hogar y el barrio, y reflexionen sobre el daño moral y económico que ocasiona a cada persona y a la sociedad en general.
Más adelante, los colegiales de secundaria del colegio Fe y Alegría que está ubicado en el asentamiento Paredes Maceda, dramatizarán escenas sobre ética y ciudadanía.
