La Contraloría General de la República emitió el informe Nº 3209-2019, en el cual da cuenta de nuevas observaciones a la ejecución del hospital estratégico de Ayabaca.
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Entre los principales hallazgos figuran que la obra no contó con un ingeniero residente, por un lapso de 46 días entre los meses mayo, julio y agosto. Es más, hubo tres cambios en este puesto clave para la ejecución de la obra. Primero estuvo Walter Timaná Miranda, luego Pedro Asalde Sipión, y actualmente Alberto Chalco Vargas.
Al hacer una revisión de la planilla electrónica, detectaron que trabajadores clave no estuvieron en la obra durante determinados días y meses. Estos son el ingeniero de campo, de metrados, de control de calidad, seguridad en obra, asistente de calidad. También se advirtió la ausencia de puestos claves de la empresa encargada de la supervisión, tales como del jefe de supervisión y especialista clave de supervisión.
El informe también da cuenta que la contratista ejecutó el trabajo de pilas de gravas compactadas, el mismo que fue aprobado por el Gobierno Regional, sin los documentos técnicos y económicos necesarios. Por lo tanto, no habría manera de verificar la calidad de la misma. A ello se suma la ejecución de otros trabajos que no están considerados en el expediente técnico.
Además, se advierte el terreno está ubicado cerca de un cauce natural de agua, el mismo que es usado como botadero. La contraloría le advierte al Gobierno Regional que todas estas observaciones están contribuyendo a que la obra no tenga la calidad necesaria.
Cabe indicar que la Contraloría ya encontró similares deficiencias en la ejecución de los hospitales estratégicos de Huarmaca y Huancabamba. De acuerdo a los informes 2021-2019-CG/GRPI-SCC y 1889-2019-CG/GRPI-SCC la institución fiscalizadora encontró que el ingeniero residente no se encontraba en obra, descuido de los materiales de obra, retrasos en la ejecución, y falta de supervisión.
Atados de manos
Al respecto el director de Obras del Gobierno Regional de Piura, Jorge Espinoza Céspedes, sostuvo que la institución enfrenta una gran desventaja debido que el contrato firmado con en el Consorcio Hospital Piura no establece penalidades o sanciones por la inasistencia de los trabajadores clave.
“Cuando se convocó la obra en las bases del concurso, en el 2015, no colocó el rubro otras penalidades, como siempre se hace en estas obras. Se debió incluir penalidades por insistencia del residente, por no presentar documentos a tiempo, por no llevar bien los procesos constructivos, entre otras más”, expresó.
Explicó que esto fue incluido en la firma del contrato, pero en el 2016, el Consorcio envió una carta donde pide que se retiren debido a que no estuvieron incluidos en los términos de referencia y las bases del concurso. “Nosotros no podemos penalizar por lo que no está en el contrato. No tenemos las herramientas, pero estamos haciéndoles la consulta al OSCE para proceder en estos casos”, expresó.
