Comuneros de Catacaos pidieron a comisión del Vaticano la disolución del Sodalicio

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El integrante de la Asociación de Cruz Blanca de la comunidad campesina de Catacaos, Marcelino Ynga Ynga, informó que los comuneros han pedido el retiro del Sodalicio de Vida Cristiana del Perú, debido al tráfico de tierras y la criminalización de campesinos. 

Cómo se recuerda, los comuneros denunciaron el tráfico de diez mil hectáreas de terreno en el sector Cruz Blanca, porción de tierras de las que se habría apropiado, de manera ilegítima, la Asociación San Juan Bautista, cuyo exmiembro fundador fue el monseñor Antonio Eguren, integrante del Sodalicio. 

«Nosotros hemos pedido justicia porque la tierra es de la comunidad, no hemos vendido ni un solo metro. Toda la comunidad de Catacaos es de los comuneros, por eso, pedimos que esta organización desaparezca del Perú», sostuvo Marcelino Ynga. 

Ante la problemática, una comisión fue enviada por el Papa Francisco a Lima. Así, los comuneros tuvieron la oportunidad de contar lo sucedido con documentos que probarían el tráfico de terrenos.

El arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y el sacerdote español Jordi Bertomeu, ambos integrantes del Dicasterio para la Doctrina de la Fe y expertos en delitos de abusos, escucharon los testimonios en la Nunciatura Apostólica para elaborar un informe que será entregado al Papa Francisco.

El comunero Ynga señaló que los pobladores de Catacaos están esperando el veredicto del Papa, con la esperanza de que este caso, que ya ha cobrado la vida de un comunero, se resuelva con justicia. 

Cabe destacar que, debido a la disputa de tierras con la Asociación San Juan Bautista, los comuneros fueron criminalizados. 

Los representantes de las empresas privadas empezaron a denunciar a los comuneros por delitos que van desde hurto agravado, falsificación documentaria, lesiones y usurpación hasta terrorismo.

La intervención de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, a partir del 2015, permitió que los comuneros fueran defendidos por abogados y se archivaron 14 de los 30 casos en los que se señaló a los comuneros como presuntos delincuentes.

Respecto a la reunión con la comisión del Vaticano, la Cnddhh se pronunció y señaló a través de Twitter: “Las/os comuneros y la Cnddhh tienen expectativa sobre el posible cierre del Sodalicio, que se repare a las víctimas y que se restituyan sus derechos”.

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