Te presentamos el comentario de hoy.
Por: Víctor Arévalo, promotor del proyecto Tu vida no tiene precio, denuncia la trata
En 1977 la Asamblea General de las Naciones Unidas formaliza el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer. Pero cerca a conmemorarse en todo el mundo para hacer conciencia sobre la importancia de empoderar a las mujeres en todos los entornos, proteger sus derechos y garantizar que estas puedan alcanzar todo su potencial; sirve para visibilizar la desigualdad y discriminación que aún viven las mujeres en todo el mundo, incluyendo la necesidad de eliminar la brecha salarial.
En este contexto, surge interrogantes. ¿Aun existen brechas de género, formas de violencia de mujeres y niñas en ámbitos público y privado?, ¿explotación sexual?, ¿trata de personas?, ¿discriminación?. A pesar de las estrategias de igualdad, la violencia de género está muy presente y se incrementa producto de idiosincrasias, creencias, posturas e intereses individuales. A esto se le suma otras desigualdades que las vivimos a cada minuto de nuestras vidas.
Un problema real es la trata de personas que no es tan visible como otros dentro de la sociedad. Este se debe a que la trata de personas es un delito de cifras negras y limitada estadística. En la trata no existe un adecuado control de estrategias por parte de las autoridades, funcionariado, operadores de justicia para contrarrestar este delito. Son el funcionariado quien debe actuar de manera inmediata en la prevención, porque atenta con la integridad de las mujeres, niños y grupos vulnerables, además de la libertad en la toma de sus decisiones.
Es una forma de violencia y violación de derechos humanos muy grave en la sociedad que requiere de instituciones que establezcan soluciones de prevención. Además, se debe considerar establecer marcos normativos en protección de las víctimas y lograr su reinserción en la sociedad.
Este comentario llegó gracias al proyecto «Tu vida no tiene precio, denuncia la trata» te invitamos a seguir leyendo nuestro próximo comentario.
