La central de Rondas Campesinas del Distrito de Sóndor, en Huancabamba, en conjunto con diferentes bases ronderiles dieron un plazo de 15 días para desalojar la caseta de control del Servicio Nacional de Sanidad Agraria del Perú – SENASA, debido a diversas acusaciones contra la entidad.
Según detallaron, la plantas frutales como naranja, palta, mango o granadilla se están secando, tras la fumigación que realiza el Senasa, en el marco del proyecto de control de la mosca de la fruta. Agregaron que, pese a estos perjuicios, no se les ha dado explicación alguna.
«Senasa está perjudicando mucho. Yo tengo cantidad de chirimoya que antes cosechaba 1300 chirimoyas y, con las fumigaciones, este año solo coseché 300 chirimoyas. Ahora yo siembro granadilla, limón, café, guaba, la parte donde ellos fumigan está un desastre, todo se cae, no produce nada. Pero lo que está protegido por mi persona, está bien cargadita, el resto no», explicó uno de los agricultores.
Otro de los problemas que denuncian es el constante decomiso de sus frutas. Según señalan, de manera prepotente y sin tener ningún reparo, les quitan sus productos, provocando gran malestar, sobre todo, en los pequeños comerciantes, que viven de la venta de fruta.
«Yo soy testigo de que les quitan las cosas [las frutas], es una lástima. Una vez me indigné viendo esas cosas. Lamentablemente, no es solo en Huancabamba, en Jaén es lo mismo, la gente transporta sus productos y los de Senasa les empiezan a trabuscar como que si lleváramos cosas que no debemos llevar. Yo no estoy de acuerdo que ellos estén allí, que se vayan, hay familias que viene a trabajar y les quitan todo. Esos de Senasa que se vayan, qué hacen malogrando la fruta», indicó una agricultura.
Senasa responde
En conversación con Cutivalú, el jefe de Senasa Piura, Daniel Angel Alama Mena, rechazó esas acusaciones y detalló que la fumigación contra la mosca de la fruta se viene realizando en toda la región y no se ha reportado ningún problema. Al contrario, según Alama, los resultados son muy satisfactorios.
«Para erradicar la mosca de la fruta se usa un producto de origen biológico y ese se utiliza en toda la región. Es decir, son 70 mil hectáreas en las que Senasa interviene y nadie se ha quejado, ni siquiera los exportadores. Nadie se ha quejado de que el producto está perjudicando, de que está quemando la planta o bajando la producción. Hay un tema allí que no se ajusta a la verdad», enfatizó Alama Mena.
Con respecto a los decomisos, el jefe de Senasa Piura alegó que lo hacen con la finalidad de evitar el ingreso de fruta que proviene de zonas no controladas y con mucho problema «de la mosca».
«En Sóndor, tenemos un puesto de control que es para proteger las áreas que ya vienen consiguiendo la erradicación de mosca de la fruta. Obviamente, ese puesto de control controla el ingreso de la fruta y nosotros lo que hacemos es comisar fruta de zonas que no tienen control y que tiene mucho problema de mosca. Entonces, eso no puede ingresar aquí a esta área que ya tiene solucionado los problemas de mosca de la fruta», precisó.
Agregó que el proyecto de control de la mosca de la fruta culminará en noviembre.