Los agentes de la comisaría de Chiclayo investigan a la piurana Marleny Guerrero Quinde de 26 años por presunto parricidio, al ser sospechosa de haber envenenado a sus trillizas recién nacidas, cuando se encontraban hospitalizadas en el área de cuidados intensivos del nosocomio.
Los hechos habrían ocurrido el último martes cuando una de las enfermeras se percató que una de las bebés estaba morada y tenía una sustancia blanquecina en la boca.
Al solicitar apoyo, los médicos solo certificaron el deceso de la menor, a causa de envenenamiento por insecticida.
En tanto, las otras dos menores empezaron a presentar síntomas de envenenamiento por lo que fueron sometidas a lavados gástricos, pero aún se debaten entre la vida y la muerte.
Tras las primeras diligencias los agentes intervinieron a Marleny Guerrero, madre de las menores, quien se encontraba desde hace 17 días con las pequeñas. Según la información preliminar, la joven mujer habría actuado por la depresión postparto.
La historia de las trillizas fue conocida a nivel regional debido a que a mediados de febrero nacieron en la provincia de Huancabamba, pero al ser un parto prematuro, las bebés presentaban males congénitos por lo que fueron derivadas de emergencia al hospital regional de Lambayeque donde las venían tratando.
Se conoció que Guerrero Quinde permanece detenida y es investigada por presunto parricidio. Esta mañana fue sometida a una pericia psicológica que determinará si actuó por algún problema mental o el crimen fue planeado.
