Más de 600 ha de café se pierden por «roya amarilla»

De las 2 mil 400 hectáreas de café de los productores asociados a Norandino en la zona de la sierra, entre 600 a 700 hectáreas se perdieron por la plaga de la roya amarilla, según informó el ingeniero Sabino Guerrero Paucar responsable técnico de NORANDINO.

EL ingeniero Gabino Guerrero Paucar señaló que hay productores cafetaleros de algunas zonas que han perdido el 100% de la producción producto de la plaga la roya amarilla, que se presenta en época seca. Mientras que otros productores han perdido entre el 10 y 20% de sus plantaciones.

En la localidad de Los Ranchos, el daño es del 30% de la producción, en el caso de Lalaquiz el 25% de la producción fue afectada entre el 2013 y 2014 por la plaga, indica Gabino Guerrero.

Los productores de Lalaquiz, y Los Ranchos, quienes se dedican exclusivamente al café innovan “las zonas prácticas” que Norandino les da a conocer, por eso es que el daño es menor, señala Guerrero Paucar.

«Las pérdidas fueron menores en estas localidades porque los productores si fertilizan, ya no tienen plantaciones viejas, ya renovaron su plantación en la última década, entonces, tienen plantas más resistentes a la roya», aclaró el especialista técnico.

En el caso de Lalaquiz, los productores cafetaleros más perjudicados son de las zonas de Usma, Maray Grande, San Lorenzo, El Papayo y Lagunas.

Por otra parte, nuestro corresponsal de Lalaquiz comunicó que en una reunión de socios productores de café convocada por la cooperativa regional  NorAndino que preside Santiago Paz, se analizó la cosecha de este producto para el 2017.

Los productores de la zona mostraron su preocupación por la baja producción del producto para el acopio de este año. Señalan que es más del 60% de la baja en la producción que tendrán que acopiar para esta cooperativa.

Según nuestra corresponsalía, hay mucha desconfianza y preocupación por parte de los productores porque sus cultivos fueron afectados por la plaga de la roya amarilla, producto de ello sus parcelas se van visto prácticamente destruidas.

«Este es el único sustento que tienen los cafetaleros para la manutención de sus familias. Cerca de 200 toneladas de café se han perdido, las plantas se han secado, ahora solo queda renovar la plantación con una nueva variedad de café», manifiestan los hombres de campo.

Foto: Referencial