La Comisión de Ética Parlamentaria ha tomado la decisión de suspender al congresista Juan Carlos Lizarzaburu por un periodo de 120 días, tras aprobar un informe que respalda la denuncia en su contra.
El legislador, perteneciente a Fuerza Popular, fue acusado de expresiones sexistas dirigidas a la parlamentaria Patricia Juárez Gallegos durante una sesión virtual en la que el micrófono del legislador estaba abierto.
La Comisión argumentó que Lizarzaburu vulneró el Código de Ética Parlamentaria al utilizar lenguaje sexista, contribuyendo o la normalización de expresiones denigrantes.
Además, se señaló que el congresista mintió al afirmar que había presentado disculpas a su colega Patricia Juárez y que habían quedado en buenos términos. Asimismo, trató de normalizar y trivializar las expresiones sexistas y que su conducta ha dañado la imagen del Congreso.
Valer apoya a Lizarzaburu
El congresista Héctor Valer en su defensa de Lizarzaburu, argumentando que la conducta fue involuntaria al tratarse de una conversación privada. Sin embargo, la Comisión rechazó esta argumentación, indicando que hubo dolo, especialmente considerando la confesión y pedido de perdón por parte de Lizarzaburu.
“Su conducta fue privada y salió al escenario público y atentó contra el honor de una colega, pero no tenía voluntad de hacerlo. El caso no fue doloso. Solicito que no se le sancione con 120 días por los argumentos que acabo de dar”, expresó. Y pidió que se le baje la sanción a 30 días.
A pesar de la solicitud de Valer de reducir la sanción a 30 días, la Comisión optó por mantener la suspensión de 120 días. La decisión ahora se trasladará al Pleno del Congreso, donde se determinará la ratificación de la sanción y las posibles implicaciones para el legislador y la institución.
Paredes refuta defensa de Lizarzaburu
En medio de la suspensión del congresista Juan Carlos Lizarzaburu por expresiones sexistas, la congresista denunciante, Susel Paredes, desestimó el argumento de que se trató de una conversación privada. Paredes destacó que la legislación internacional y nacional reconoce que la violencia contra la mujer no distingue entre ámbitos público o privado y subrayó que cualquier atentado es condenable.
«Hay que tener en cuenta que las expresiones del congresista Valer no están de acuerdo con lo que señala el derecho peruano e internacional sobre actos de violencia contra la mujer. Ha habido dolo porque hubo confesión y pedido de perdón por parte del congresista Carlos Lizarzaburu. No fue un accidente», indicó Paredes, rechazando la posición del congresista Héctor Valer.
La Comisión de Ética Parlamentaria respaldó la posición de Paredes y aprobó por unanimidad la dispensa de aprobación del acta. El caso avanza ahora hacia el Pleno del Congreso, donde se decidirá la ratificación de la sanción impuesta a Lizarzaburu.
