
Pobladores del asentamiento Víctor Raúl, en Piura, tomaron el local donde eventualmente funciona el centro de salud de la zona, exigiendo la culminación del 20% de la obra de modernización del establecimiento.
Los vecinos fueron drásticos y como medida de protesta prohibieron el ingreso a los 60 trabajadores de salud, que atienden a más de 22 mil habitantes.
El médico encargado de la posta, Edwin Prado, dijo a Cutivalú que la obra de reconstrucción del centro de salud debió durar 5 meses, sin embargo, han pasado 2 años y hasta el momento tienen que seguir atendiendo en el local Club de Madres Fraternidad, espacio que no es el adecuado.
«No tenemos logística, el espacio no está dividido, y trabajamos hacinados. Nosotros pagamos cerca de 1000 soles en servicios, a pesar de ser local del Estado», sostuvo el médico.
Se informó que a la zona llegaría el director regional de Salud, Hernán García, para dialogar con la población que ya está cansada de recibir una pésima atención.