Han pasado más de 52 días desde que cuatro pescadores desaparecieron en altamar, luego de zarpar del puerto de Ancón con destino a Pisco. A la fecha, sus familias aún no reciben respuestas ni acciones concretas por parte de las autoridades.
Ante la desesperación, los familiares llegaron hasta el Gobierno Regional de Piura para exigir una búsqueda real y efectiva. Entre ellos, Francisca Antón, madre de Miguel Pingo, uno de los desaparecidos, recordó con tristeza la última conversación que tuvo con su hijo el pasado 25 de abril, cuando partió rumbo al mar.
«La última comunicación con mi hijo es que iba de pesca y que regresaba pronto», relató entre lágrimas Francisca Antón.
Luis Durán, hermano de Johny Durán (capitán de la embarcación), denunció la falta de apoyo de la Marina de Guerra del Perú y del propio Gobierno Regional. Ambos, dijo, son responsables de no haber activado una búsqueda seria desde los primeros días.
Según indicó, las labores de rastreo sólo se han realizado dentro de un radio de 50 millas náuticas, lo cual consideran insuficiente.
«Por los días que llevan desaparecidos, deberían buscarlos más allá de las 150 millas. Entonces, nuestro pedido es que lo busquen más allá, vía aérea, ya sea en una avioneta, un helicóptero, porque con un barco, la verdad, ahorita va a ser más difícil encontrarlos» sostuvo Durán.
DUEÑO DE LA EMBARCACIÓN AUSENTE
Otra de las preocupaciones de los familiares es la inacción del dueño de la embarcación, quien no ha respondido a las llamadas ni se ha pronunciado. Los familiares aseguran sentirse abandonados y exigen que esta persona asuma su responsabilidad.
«No nos contesta el teléfono. Ignora a las familias que tienen hijos, aquí el dueño debería hacerse responsable», agregó Luis Durán.
Los familiares esperan que la Marina de Guerra y el Gobierno Regional amplíen de inmediato la zona de búsqueda, incorporen patrullaje aéreo y extiendan el rastreo a zonas más alejadas del litoral. También exigen que se identifique y sancione a los responsables de esta aparente negligencia.
