Hasta la fecha, la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus ha ocasionado la muerte de 329 piuranos, quienes en muchos casos fallecen por la falta de oxígeno en nuestra región o mientras sus familiares buscan desesperados un ventilador mecánico para estabilizarlos.
La misma situación viven los efectivos policiales, quienes a diario, salen a las calles para controlar que la población se quede en casa y se contagian del covid-19. Es ahí cuando comienzan una nueva lucha, pero esta vez por su vida, tal como lo relata el hijo de un policía quien falleció, según denuncia a través de sus redes sociales, sin recibir el apoyo «de los altos mandos de la PNP».
Es muy triste tener que escribir por este medio los siguiente:
Mi padre amó la Policía y yo lo amaba a él,como tantas veces el siempre salía feliz a cumplir con su trabajo, sin pensar que ya no regresaría. Es muy triste darme cuenta y vivir sus últimos momentos, cuando su institución lo abandonó, no lo digo por todos, porque muchos de sus colegas estuvieron pendientes de lo que necesitaba él, pero poco se podía hacer.
Es triste saber que la Policía contrate un seguro (SALUDPOL) y que simplemente no sirva para nada. Ellos que luchan día a día, y más ahora exponiéndose en la calle con ese maldito virus. Esos policías y mucha gente como enfermeros, doctores deberían tener sus seguros de primera, porque corren mucho riesgo, son guerreros.
El día que se puso mal mi padre el 06/05, fui a la SANIDAD, hacer caminar a mi padre cuando le faltaba el oxígeno Y QUE LE DIGAN ACÁ NO PODEMOS HACER NADA, VAYA AL PRIVADO PORQUE A SU PADRE LE FALTA OXÍGENO, me fui con pena y cólera, llegar al HOSPITAL PRIVADO POR EMERGENCIA Y me digan SEÑOR ESPERE SIÉNTESE AHÍ, Y BUSQUE OXÍGENO POR QUÉ NO HAY, PERO EN REALIDAD SI HABÍA, pero creo que querían que les rueguen.
Es triste que mi padre sufriera y ME INDIGNA que sea por negligencia de algunos doctores, pues él debía recibir oxígeno de 15 litros por minuto, para mantener una saturación de 87-90, y estar más tranquilo y estable. Estos malditos esperaban sacarnos a la hora de dormir, para bajarle el oxígeno a 10 litros por segundo. Yo entraba calladito porque sentía que algo no está bien y encontraba a mi papá sentadito faltándole la respiración con una saturación de 50-55, yo mismo tenía que subirle y así estabilizar a mi padre, se les preguntaba a las enfermeras y doctores y decían que lo hacían porque ya no había oxígeno, pero era mentira porque yo mismo constaté que si había y un trabajador me confirmaba que si había hasta el día siguiente.
Esto pasa con todos los pacientes, pedir que le tomen la temperatura y que te digan que están ocupados, pedirles un termómetro y te digan no hay, yo mismo tenía que medirle su temperatura. Su desayuno es otro problema, ellos que necesitan fuerzas, desayunaban a las 10:30am y 11:00 am y eso que a las 6:00 am tomaban los antibióticos muy fuertes y muchos se quejaban de la ardencia del estómago. Cuando yo ya le había comprado su avena a mi padre y galleta, que llegue la hora de su medicina y en ese momento te digan que ya no tienen, que se les acabo y tu ver la manera de prestarle a otro paciente y luego reponer, porque entre todos nos ayudamos a cuidar a nuestros seres queridos.
Mi padre empeoró, mientras que yo buscaba ayuda, le pregunté a un doctor y me dijo ya no se puede más tu papá necesita un respirador artificial, le dije acá no tienen, muy simple, me dijo yo no sé eso consúltalo con las enfermeras, fui a consultar y me dijeron no hay están ocupados, yo entiendoque estén ocupados pero lo que no entiendo es porque si saben que no hay medicina o algo esperan el último momentos para decirlo, para correr como loquito en busca de ayuda.
Pedí ayuda a los altos mandos y nada, pedí ayuda a mis amigos y entre todos buscando por ahí hubo de luz de esperanza, pero triste fue el momento cuando me dijeron que no había una ambulancia para poder movilizar a mi padre, él ya no podía, y me dijo ven hijo ya quédate a mi lado, y ahí con él hasta el final, porque prometimos salir juntos los dos. Sin ningún doctor tratando de ayudarlo, solo yo golpeando sus pulmones para de alguna manera ayudarlo a respirar con una saturación de 35 ya mi padre no podía más, solo cuando dejo de respirar, llegaron los doctores a decirme tu padre murió.
Soy de las pocas que escribe algo para llamar la atención y más cuando se trata de mi padre que ya no está a mi lado.
SI ESCRIBO ESTO ES PARA QUE SE DEN CUENTA QUE EL POLICÍA ES ABANDONADO Y DEJADO EN MANOS DEL GRANDIOSO SERVICIO DE LA ASEGURADORA SALUDPOL Y DEL HOSPITAL PRIVADO PIURA.
Me da pena y espero que me ayuden a compartir esta historia, para que de alguna manera se les ablande el corazón y ayuden a esos policías, enfermeros y doctores que tienen ganas de ayudar a su país con mejor trato y mejores atenciones.
Con esa alegría, hasta el final haciendo nuestras bromas, y con esas ganas que tuviste de aférrate a la vida, sonriente hasta dejar de sentir ese apretón de mano y tu respiración , te digo que voy a cumplir todo lo que pediste. Te amo aquí y te amare siempre padre, estés donde estés te amare. Así como dijiste ya no estaré para su quinceañero de mi hija, pero le hablaré cada día de ti. Gracias por todo, cuida a tu familia y cuida a tus colegas.
Paseo diario de menores de 14 años queda prohibido en Piura y otras regiones con más casos de Covid
