
En el marco del proyecto “Construyendo Juntos Proyectos de Vida”, impulsado por Pacasmayo y Cutivalú, se desarrolló una nueva sesión psicoeducativa con estudiantes de 1.º, 2.º y 3.º de secundaria de la I.E. 20138 del distrito Veintiséis de Octubre, bajo el título: “Respeto, tolerancia y empatía”.

Esta jornada tuvo como objetivo fomentar una convivencia escolar más armoniosa, reconociendo el valor que tiene cada persona, sus emociones y sus diferencias. Para lograrlo, se aplicaron diversas dinámicas y momentos de reflexión que permitieron a los estudiantes conectar de forma profunda con el tema.
La sesión inició con la visualización de un video que dio paso a una lluvia de ideas, donde los estudiantes compartieron cómo entienden y viven estos valores en su entorno. A partir de ello, realizaron una dinámica simbólica con una hoja de papel, que fue arrugada e insultada como representación del daño que pueden causar nuestras palabras. Al intentar alisar nuevamente el papel, comprendieron que, aunque se pida perdón, las huellas que dejan los insultos no desaparecen fácilmente.

“El respeto se construye en lo cotidiano, y las palabras tienen un poder que a veces no dimensionamos. Esta dinámica ayuda a tomar conciencia sobre el impacto de nuestras acciones en los demás”, comentó Olga Chonto Ojeda, psicóloga del proyecto.

Posteriormente, se realizó otra dinámica en la que los estudiantes escribían un “castigo” o acción para otro compañero, pero quien terminaba realizando la actividad era el mismo que lo propuso, reforzando así el valor de la empatía y la importancia de tratar a los demás como nos gustaría ser tratados.
La sesión cerró con una reflexión grupal y preguntas clave que invitaron a los estudiantes a pensar cómo pueden practicar el respeto, la tolerancia y la empatía desde hoy, en su vida diaria. Además, se les entregó material educativo para que puedan seguir profundizando en estos valores.
Con actividades como esta, el proyecto Construyendo Juntos Proyectos de Vida reafirma su compromiso de formar no sólo estudiantes con conocimientos, sino personas más conscientes, respetuosas y empáticas, capaces de construir relaciones sanas dentro y fuera de la escuela.
