Editorial: Congresistas de poca calidad política

Editorial: Congresistas de poca calidad política

“El sur sabía lo que iba a pasar con el país, por eso el año pasado salieron a protestar y nosotros los piuranos recién estamos viendo lo que pasa en el país. Este Congreso está destruyendo el país”. Son las palabras de una joven piurana en la marcha del miércoles 6 contra la Ley 31973, ley que promueve la destrucción de los bosques. Una de las tantas leyes contra el Perú.

El Congreso, que debe velar por los intereses del país, hoy está en contra del país. Está destruyendo la poca democracia participativa que teníamos. Las palabras de esta joven son un llamado a la ciudadanía de Piura en general, a darse cuenta de que el país está en manos de delincuentes que llevan más de 14 meses legislando, para tener impunidad y asegurar su continuidad.

El país no les interesa. ¿Conoce usted alguna ley que haya beneficiado a la población más pobre de Piura o del Perú en estos últimos 30 meses? Ninguna. Solamente leyes para sus amigos empresarios y políticos.

Desde el 7 de diciembre del 2022, el país ha quedado a merced de una manada delincuencial, liderada por el Fujimorismo, apoyada por Alianza para el Progreso, Podemos Perú, Avanza País, Renovación Popular y Perú Libre. Todos estos partidos con fines personales que seguramente volverán a pedirle su voto.

El Fujimorismo y el Cerronismo se unieron en matrimonio para destruir la poca democracia que había en el Perú. La dictadura del Congreso. Ayudados por Dina Boluarte, que ha criminalizado la movilidad social, dejando inactiva a la ciudadanía para protestar contra las repartijas de poderes para los próximos años.

Sí, eso nos pasa porque elegimos mal, elegimos partidos cuyos candidatos y candidatas tienen procesos judiciales. Cuando llegan al poder usan ese poder para lograr más impunidad. Al escuchar estas palabras, seguramente ud. está diciendo, “pero si todos son corruptos”.  Con esa expresión justificamos lo mal que elegimos cada vez que tenemos la oportunidad de elegir mejores candidatos. De Piura tenemos los siguientes congresistas:

  1. Heidy Juárez Calle (Alianza Para el Progreso), con una actual acusación de supuesto delito de Concusión, en el caso Mochasueldos. Si revisamos las redes sociales o la internet, no hay noticias de haber logrado buenas leyes para Piura.
  2. Manuel García Correa (Alianza Para el Progreso), con una denuncia por el presunto delito de peculado doloso, incumplimiento de funciones y otros delitos. Denuncias desestimadas por la fiscalía provincial de Huancabamba. Tampoco se registran logros de leyes en favor de la población pobre de Piura.
  3. Wilmar Elera García (Somos Perú), prófugo de la justicia desde hace más de cinco meses, tras ser condenado a una pena privativa de la libertad de seis años. De su reemplazante José Pazo Nunura, no hay ninguna noticia de que haya logrado algo para Piura.
  4. Eduardo Castillo Rivas (Fuerza Popular), denunciado por violencia familiar y maltrato psicológico contra su esposa.
  5. Cruz María Zeta Chunga (Fuerza Popular), con denuncia de presunto delito de peculado y falsificación de documentos para justificar el uso irregular del dinero entregado por el Congreso.  Tampoco registra logros para la población de Piura.
  6. César Revilla Villanueva (Fuerza Popular), aquel que dijo que la renuncia de Dina Boluarte no resolvía los problemas del país. Tenemos un gobierno totalmente inepto, que gobierna para el Congreso.
  7. Miguel Ciccia Vásquez (Renovación Popular), con rumores de haber ayudado a empresas inmobiliarias familiares para favorecerse del Estado.

Congresistas de poca monta, pocos logros en favor de la ciudadanía. Si revisamos sus votaciones en el Congreso, vemos que han votado en favor de la destrucción de la Junta Nacional de Justicia, contra la SUNEDU o contra la calidad de educación superior; en favor de la ley forestal que pone los bosques al servicio de las mafias taladoras, en favor de las minerías informales.

En fin, La democracia y la voz de la ciudadanía les importa poco. Estos malos congresistas usan como mecanismo el silencio, no dan opiniones a la prensa porque tienen miedo a ser cuestionados. No representan nada ni a nadie. Queda la tarea de que en la siguiente elección pensemos mejor nuestro voto.