Hace 38 años, el ejército peruano instaló una base militar en Manta, Huancavelica, para luchar contra el terrorismo, pero no lo hicieron y atentaron contra las mujeres de Manta y Vilca. El caso Manta es el único en nuestro país en el que los militares son investigados específicamente por violaciones sexuales ocurridas en esa época.
Cynthia Silva Ticllacuri, directora de Estudio para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Demus), contó que la institución acompaña a tres de las nueve mujeres denunciantes desde el 2007. El Instituto de Defensa Legal (IDL) acompaña a las otras 6 mujeres denunciantes.
A pesar que solo son nueve los casos investigados, son aproximadamente 5 mil casos de violación sexual donde las víctimas fueron niñas, adolescentes y adultas, según el Registro Único de Víctimas del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
Segundo juicio oral
El primer juicio oral empezó en el 2016, pero se interrumpió debido a que la presidenta de la sala estaba involucrada en la red Los Cuellos Blancos del Puerto y existía el riesgo de que hubiera corrupción. Víctor Álvarez Pérez, abogado del caso, recordó que “quienes estuvieron a cargo de ese juicio actuaron con evidente parcialidad y desconocimiento de que se encontraban frente a las víctimas”.
El segundo juicio oral está próximo a cumplir 4 años. “Confiamos en que se pueda llegar a obtener justicia y que se puedan determinar las sanciones a las responsabilidades penales que deben señalarse”, agregó.
Silva Ticllacuri indicó que ellas se encuentran fortalecidas porque reciben un acompañamiento integral. “Hay heridas que no se han sanado y parte de esa de esa sanación tiene que ver con el poder obtener una condena justa y que corresponda a la magnitud del daño que ellas han sufrido”, agregó.
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Juicio reservado
El juicio no se transmite mediante Justicia TV porque se le otorgó el carácter de reservado; por lo tanto, se puede seguir el avance mediante las redes sociales de Demus.
“El carácter de reservado que el colegiado, lamentablemente, ratificó ante nuestros últimos pedidos de que sea un juicio público no se amparó por lo tanto ellas no pueden ver sus juicios”, indicó, así que se mantienen informadas por su abogado y el equipo que las acompaña.
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