El alcalde de Ayabaca, Baldomero Marchena Tacure, se pronunció sobre los cuestionamientos que recaen en la anterior gestión que lideró su padre Humberto Marchena, durante tres periodos.
En diálogo con Cutivalú, Baldomero Marchena le trasladó la responsabilidad de fiscalización a la Contraloría General de República, argumentando que toda la información recabada durante el proceso de transferencia de gestión, fue remitida a esta institución.
“Todo ese informe fue enviado a la Contraloría y es esta institución la que debe pronunciarse de cómo está la situación de nuestra provincia de Ayabaca. Yo he encontrado obras paralizadas y todo eso lo hemos llevado a la Contraloría”, añadió el menor de los Marchena, sin dar mayores detalles.
Funcionarios de confianza
Sobre los 10 funcionarios de confianza que la Contraloría observó en la Municipalidad de Ayabaca, por no cumplir con el perfil profesional que exige la norma, el alcalde Marchena reconoció que hasta el momento solo uno de ellos fue separado del cargo. Los otros 9 siguen laborando en la comuna.
“Nombré una comisión presidida por el jefe de Recursos Humanos y el de Administración para que evalúe los expedientes. El problema ya se solucionó y un trabajador ha sido separado, y los demás adjuntaron a sus expedientes la experiencia que su cargo establece”, expresó el alcalde ayabaquino.
El alcalde precisó que se trata del trabajador, Óscar Nieves, quien ostentaba el cargo de subgerente de Fiscalización pero ya fue separado.
Por otro lado, Marchena negó que sus funcionarios de confianza pertenezcan a su movimiento político Fuerza Regional, y que su nombramiento obedezca al pago de favores políticos.
“Son profesionales ayabaquinos que tienen experiencia, y la Contraloría está trabajando de la mano con nosotros para que no cometamos errores y también para que nos fiscalicen”, aseguró.