Monseñor Cabrejos: «El pecado se perdona, el delito debe castigarse»

Alan García Pérez, cuando era presidente.

Frente al clima de incertidumbre que se vive por el pedido de asilo diplomático de Alan García en un intento por evadir la justicia peruana que lo investiga por delitos comunes, el presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, Miguel Cabrejos, detalló a través de una serie de tuits sus opiniones sobre la política en el país.

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De esta manera, el también arzobispo de Trujillo reveló en una de sus publicaciones durante una entrevista en Radio Santa Rosa con Rosa María Palacios que «podemos salir de esta crisis de corrupción» y que no se puede perder la fe. Además, agregó en relación al comunicado de la institución mencionada que «está enmarcado en la doctrina social de la Iglesia» y que «el pecado se perdona, pero el delito sí debe castigarse, analizarse y sacar una conclusión».

Cabe precisar que el pronunciamiento de la Conferencia Episcopal Peruana indicaba que «hay un estado de derecho y que no hay persecución política», en referencia a los reclamos de Alan García y otros congresistas que lo apoyan.

Por otra parte, Cabrejos también destacó en otros tuits que aún no ha hablado con la Conferencia Episcopal Uruguaya «porque cada episcopado es autónomo», sin embargo, apuntó que si la institución los llama para «pedirnos nuestro pensamiento sobre lo que está pasando, estamos dispuestos a darlo».

Asimismo, la autoridad religiosa destacó que un Estado que vive «sistemáticamente en corrupción«, sería una «podredumbre». En contraposición a ello, destacó también que en el país existe «una reserva moral de la población que pide corrección a todas las cosas negativas que pasan en este país» y que ello se ve traducido en un «grito de la población por todas las preocupaciones políticas y judiciales».

Estas declaraciones se dan en el contexto de la lucha contra la corrupción que vive el país así como las investigaciones que se siguen contra imputados como Keiko Fujimori, y el panorama aún incierto del expresidente Alan García, que tienen como fondo común la constructora brasileña Odebrecht.